FMI subraya la urgencia de reservas y consenso político para respaldar la agenda económica de Milei

ECONOMÍA Agencia de Noticias del Interior
fmi-dolarjpg
  • El FMI exigió a la Argentina acumular reservas y mantener disciplina fiscal como ancla central de su plan económico.
  • Julie Kozack advirtió que la reducción de la inflación requiere de políticas monetarias consistentes y de respaldo político interno.
  • El Banco Central vendió entre u$s300 y u$s450 millones para contener al dólar, que cerró a $1.470 en algunas entidades.
  • Estados Unidos y organismos multilaterales ratificaron su apoyo al gobierno de Milei y negocian un swap de monedas por u$s20.000 millones.
  • Kristalina Georgieva señaló que los intereses de Washington y del Fondo están “alineados” respecto a la Argentina.
  • El FMI advirtió que la falta de acumulación de reservas es la principal debilidad del país frente a los próximos vencimientos de deuda.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) reiteró este jueves la necesidad de que la Argentina acumule reservas internacionales y genere un amplio respaldo político para avanzar con la agenda de reformas del gobierno de Javier Milei. La vocera del organismo, Julie Kozack, subrayó que la estabilidad lograda en materia inflacionaria requiere de un compromiso “inquebrantable” con la disciplina fiscal, acompañado de políticas monetarias consistentes y un esquema cambiario orientado a reconstruir las reservas.

Durante una conferencia de prensa en Washington, Kozack destacó: “Creemos que fortalecer la confianza y mantener el enorme progreso en la reducción de la inflación seguirá requiriendo el compromiso de la autoridad con el ancla fiscal”. También puso énfasis en la necesidad de generar consensos políticos internos, un punto que se repite en cada recomendación del organismo.

En paralelo, la funcionaria valoró el apoyo de los Estados Unidos, del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo, señalando que “seguimos trabajando estrechamente con las autoridades para apoyar a la Argentina en su camino hacia un crecimiento más sostenible e impulsado por el sector privado”. Estas declaraciones se dieron en momentos de marcada tensión cambiaria: el dólar oficial subió $50 en el Banco Nación y se vendió a $1.470 en otras entidades, pese a que el Banco Central intervino con ventas estimadas entre 300 y 450 millones de dólares.

La presión sobre la divisa ocurre a pesar de la fuerte liquidación de exportadores de granos, favorecidos por la quita temporal de retenciones, y en un marco donde el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, ratificó que su país hará “todo lo que sea necesario” para sostener la gestión de Milei. La relación con Washington se convirtió en un pilar clave de la estrategia económica argentina, en especial tras el anuncio de negociaciones por un swap de monedas con el Tesoro norteamericano por u$s20.000 millones.

La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, también reforzó este alineamiento. Tras reunirse con Milei en Nueva York, sostuvo que el Fondo y Estados Unidos trabajan en sintonía para garantizar estabilidad macroeconómica y consolidar reformas estructurales en Argentina. “Damos la bienvenida al apoyo de Estados Unidos y de los organismos multilaterales. Sus intereses y los nuestros están alineados”, afirmó.

El organismo, sin embargo, no oculta su preocupación por la dificultad del país para cumplir con la meta de acumulación de reservas, la única variable en la que la Argentina se muestra rezagada. Con vencimientos por casi u$s2.700 millones hasta fin de año y obligaciones por más de u$s18.000 millones en 2026, la debilidad del BCRA se convierte en un punto crítico.

A su vez, Gita Gopinath, exnúmero dos del FMI, advirtió que el respaldo externo resulta insuficiente si no es acompañado por cambios internos. “El apoyo estadounidense ayuda a prevenir fluctuaciones cambiarias, pero un progreso duradero exigirá que la Argentina adopte un régimen cambiario más flexible, acumule reservas y genere consensos internos para las reformas”, sostuvo.

El futuro del programa con el Fondo depende de esa combinación de disciplina fiscal, solidez institucional y respaldo político. El desafío no se limita a la macroeconomía: implica garantizar que las políticas aplicadas hoy sean sostenidas en el tiempo hasta volverse irreversibles, tal como reclamó Georgieva. En ese sentido, la administración Milei enfrenta el reto de convertir las señales de confianza externas en resultados concretos de estabilidad interna, un terreno donde las tensiones cambiarias siguen marcando la agenda.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto