Argentina diseñó una estrategia de dos etapas para cerrar el nuevo programa con el FMI
ECONOMÍA Román LEJTMANArgentina desplegará una estrategia de dos pasos para negociar un nuevo programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que tendría un desembolso extraordinario para fortalecer las reservas del Banco Central y abrir el cepo financiero.
La propuesta del Ministerio de Economía incluye nuevos plazos para los pagos de los intereses y de la deuda contraídos durante la administración de Mauricio Macri, y aún no está definido si el probable crédito será bajo la forma de Stand-By o de Facilidades Extendidas.
En 2025, Argentina tiene que pagar vencimientos de intereses por 3.037 millones de dólares, y a partir del 2026 -cada semestre- hay que cancelar cuotas de capital por un total de 45.000 millones de dólares hasta el 2034.
El objetivo básico de la negociación de Caputo y su equipo con Georgieva y su staff es lograr que todos los vencimientos -capital e intereses- se achiquen en montos y se extiendan en plazos. A cambio, el ministro de Economía ratificará su compromiso de mantener las actuales pautas sobre emisión monetaria, déficit fiscal y caída de la inflación.
Milei junto a Caputo se encontrarían con Georgieva durante el Foro de Davos. Estaba previsto que los tres coincidan en esa villa alpina, pero Milei fue invitado por Donald Trump a su asunción, y ello postergó la llegada de la delegación oficial a Suiza.
Como sucedió este año, el presidente describirá en Davos su perspectiva sobre la actual situación global, y en primera fila estarán su jefe del Palacio de Hacienda, Karina Milei -secretaria General- y el canciller Gerardo Werthein.
Trump considera que Milei es su socio estratégico en America Latina, y esa sintonía ideológica y política juega a favor de la Argentina al momento de definir la estructura económica del próximo acuerdo con el Fondo.
Si finalmente hay cónclave en Davos, Georgieva podrá conocer los detalles del encuentro que Milei y Trump protagonizarán después de la ceremonia de asunción en DC.
La estrategia de negociación de la Argentina se apalanca en los vínculos personales de Milei y Trump. El Presidente de los Estados Unidos ejercerá su poder institucional sobre el board del FMI, y es muy probable que Milei obtenga el desembolso extra que necesita para fortalecer las reservas del Banco Central y abrir el cepo.
La suma definida en la Casa Rosada oscila entre los 11.000 y 20.000 millones de dólares.
Pero la decisión política de Trump necesita del cumplimiento de ciertas formalidades en el Fondo y la administración republicana. Caputo y su equipo tienen que avanzar en el acuerdo técnico con Georgieva y el staff del FMI - primer paso de la negociación-, y a continuación mantener una reunión clave con Scott Bessent, próximo secretario del Tesoro de Trump.
En este contexto, José Luis Daza -viceministro de Economía-, Pablo Quirno -secretario de Finanzas- y Vladimir Werning, vicepresidente del Banco Central, llegarían a Washington a fines de enero o principios de febrero para mantener encuentros con Luis Cubbedu, que está a cargo de las negociaciones en nombre del FMI.
Cuando las conversaciones a nivel técnico ya estén muy avanzadas, Caputo y su equipo serán recibidos por Bessent, quien primero debe ser ratificado por la Cámara de Senadores. Esa reunión clave para la Argentina, sucedería en marzo de 2025, si en Casa Rosada consideran que es momento de utilizar el respaldo político de Trump.
El respaldo político de Trump es un asset que Argentina no sólo utilizaría para obtener un desembolso extra del FMI, cuando ya se deben 45.000 millones de dólares de capital a pagar hasta 2034. Ese apoyo del presidente de los Estados Unidos debería servir también para lograr que el Fondo haga un nuevo desembolso, pese a la ausencia de una ley en el Congreso ratificando el nuevo acuerdo.
La ley Martín Guzmán establece que una nueva deuda con el FMI necesita la aprobación parlamentaria, y es poco probable que en un año electoral la oposición facilite el trámite legislativo a la Casa Rosada.
Georgieva exigió a Alberto Fernández y a su ministro Guzmán que la transformación del crédito Stand-By de Macri a un crédito de Facilidades Extendidas debía tener ratificación en ambas cámaras. Y así sucedió. Al margen de la decisión política de Cristina Fernández de Kirchner y Máximo Kirchner que ordenaron a sus bloques votar en contra de su propio gobierno.
Esa exigencia institucional de Georgieva podría implosionar con una orden directa de Trump, porque se trata de una recomendación formal sin peso coercitivo.
Es decir: el desembolso extra podría llegar. Pero a diferencia de Georgieva, su staff y el board del FMI, Milei y su equipo económico posiblemente sean denunciados ante la justicia federal, ya que tomaron nueva deuda sin la aprobación del Congreso.
Como explicaron Hans Kelsen -Teoría Pura del Derecho- y Juan Bautista Alberdi -Las Bases-, un decreto no puede reemplazar una ley, si el Congreso está en sesiones.
Fuente: Infobae