En modo ‘últimos días del cole’, De Loredo le hizo un guiño a Milei por los DNU

POLÍTICAAgencia 24 NoticiasAgencia 24 Noticias
multimedia.normal.aeb8b40fc8e9620c.RGUgbG9yZWRvIGRpcHV0YWRfbm9ybWFsLndlYnA%3D

Dentro del marco de una sesión tensa, pero sin las fricciones que se esperaban en la previa por el caso José Luis Espert, el Gobierno consiguió algo de alivio y guiño de aliados en la discusión por la reglamentación de los DNU. Ocurre que, la oposición logró reunir los votos para el quórum, y luego la cantidad de voluntades para la aprobación en general del proyecto.

Sin embargo, a la hora del debate en particular, los diputados por Misiones, los chubutenses y el bloque radical que comanda el cordobés Rodrigo de Loredo le hicieron un guiño a la gestión de Javier Milei y mandaron a seguir el debate en el Senado.

“La oposición trae una reglamentación de los DNU en términos teóricos muy positiva y necesaria, pero que intenta aplicarle en tiempo récord a un gobierno débil en términos democráticos, lo que no les aplicó a otros gobiernos, ni siquiera al propio en su momento que encima tenían mayoría parlamentaria”, argumentó De Loredo quien luego pidió que se aplique, pero que eso ocurra recién a partir del 10 de diciembre del 2027.

 “Proponemos que se mejore esta reglamentación institucional pero que sea aplicable para el 10 de diciembre del 2027. De lo contrario, los argentinos estamos de nuevo con dos opciones: se desestabiliza un gobierno o se continúa con vetocracias y DNU”, destacó De Loredo al pedir, en particular, la modificación del artículo 3.

El radical también aprovechó su momento para volver a cruzar al gobernador cordobés Martín Llaryora al decir que “hay gobernadores, como el de Córdoba, que en este recinto parecen suizos, pero gobiernan sus legislaturas con decretos delegados”.

En general, la votación había terminado con 140 diputados a favor, 80 en contra y 17 abstenciones. Para impulsar la modificación a una ley que en su momento surgió como una iniciativa de Cristina Fernández de Kirchner en 2006, durante la presidencia de Néstor Kirchner.

Durante la sesión de ayer en Diputados, lo importante radicaba en que ambas cámaras deben pronunciarse sobre la validez de los decretos para que sean ratificados, cuando actualmente sólo basta con que se discuta en alguno de los dos recintos.

Además de la polémica puesta en los famosos 90 días corridos para que el Congreso se exprese ante un DNU. Lo que marcó la abstención de De Loredo y de las también radicales cordobesas Soledad Carrizo y Gabriela Brouwer de Koning. Tres que no seguirán en la Cámara a partir de diciembre de este año.

Sin embargo, dentro de los parlamentarios que acompañaron en general la votación, pero se abstuvieron en el momento de la discusión en particular por el artículo 3 estuvo el hombre del PRO y candidato a renovar su banca, Héctor Baldassi. Quien, una vez más, se movió en Diputados de la misma manera que lo hizo el larretista Álvaro González.

El escándalo Manes, el impacto en PU y el voto cordobesista

El mediodía del miércoles marcó, como se dijo, el arranque de una sesión tensa, aunque sin la mirada puesta un 100% en el caso Espert por el pedido de licencia hasta diciembre del ahora excandidato bonaerense, investigado por sus vínculos con el narcotráfico. De todas maneras, el arranque tuvo un cruce que se hizo viral entre el diputado Facundo Manes y el presidente de la Cámara, Martín Menem; con el radical diciendo que el libertario lo había amenazado en los pasillos y el riojano desmintiéndolo en redes.

Tras ello, y una vez que se consiguió el número para el quórum y que arranque la discusión, el poroteo en el cordobesismo se puso atractivo. En primer lugar, porque la diputada Alejandra Torres decidió ausentarse de la sesión por diferencias en el temario; sin embargo, Ignacio García Aresca, Carlos Gutiérrez y Juan Brügge aportaron al quórum y votaron junto a la oposición los cambios en los DNU.

Al igual que, dentro del mismo bloque, lo hicieron Oscar Agost Carreño y Natalia de la Sota.

Maniobra que desde el espectro libertario dista de la gobernabilidad y las herramientas que aseguran garantizar los cordobesistas cuando se habla de respaldo al Gobierno. Independientemente de qué color político tengan. Y es lo que, precisamente, en las últimas manifestaciones públicas dijo el exgobernador y candidato a diputado de Provincias Unidas, Juan Schiaretti.

Lo que, sin dudas, grafica el escenario en el vínculo entre Casa Rosada y los gobernadores a menos de tres semanas de la elección legislativa y con un marcado contexto de debilidad política por parte del Gobierno nacional. Subsanado ayer por la manera en la que encontró aire en Diputados a la hora de patear la discusión nuevamente al Senado.

En la relación con los cordobesistas, en las últimas semanas se vieron con mayor nitidez algunas discusiones que, hasta hace algunos meses, se zanjaban de otra manera. Con más equilibrio. Ahora, con el cuidado de no sobregirarse para no quedar pegados en las votaciones con los K como contó Alfil esta semana lograron conservar la distancia.

Asimismo, el integrante de Provincias Unidas que salió a dar una mano al Gobierno fue el gobernador de Chubut, Ignacio ‘Nacho’ Torres. El hombre del PRO se sumó a la movida de los radicales de De Loredo y del misionero Carlos Rovira para darle una prórroga a este Gobierno por la discusión en torno a los DNU y que siga en la Cámara alta.

CON INFORMACION DE DIARIOALFIL.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto