El mercado modera su euforia tras la victoria de Milei y mantiene la presión sobre el dólar

ECONOMÍA Agencia de Noticias del Interior
605495
  • Euforia inicial en los mercados tras el triunfo de Milei, pero con señales de cautela.
  • El dólar mayorista subió el día lunes $90, cerrando en $1.430.
  • El riesgo país cayó a 650 puntos y repuntaron bonos y acciones.
  • Las tasas de interés se mantienen en niveles muy altos, con falta de liquidez.
  • Economistas y bancos piden dejar flotar el peso y acumular reservas.
  • Caputo enfrenta una semana clave por el vencimiento de $12 billones en deuda.

El resultado electoral favorable para La Libertad Avanza (LLA) generó un clima de euforia inicial en los mercados, con una fuerte recuperación de bonos y acciones argentinas. Sin embargo, la reacción financiera del lunes poscomicios mostró matices: el dólar mantuvo una demanda firme, las tasas de interés continuaron en niveles récord y la volatilidad cambiaria volvió a ser protagonista. El mensaje de los inversores fue claro: ganar la confianza del mercado será más difícil que ganar en las urnas.

En la apertura del día lunes, el tipo de cambio mayorista cayó hasta los $1.340, impulsado por el entusiasmo de los operadores tras el triunfo libertario. Pero el escenario se revirtió en pocas horas: hacia el cierre, la cotización trepó a $1.430, en una muestra de la cautela que todavía domina a los grandes fondos. El volumen operado, cercano a u$s400 millones, reflejó esa incertidumbre.

El dato positivo fue la casi desaparición de la brecha cambiaria: la distancia entre el dólar oficial y el “contado con liqui” quedó por debajo del 2%, luego de haber superado el 10% en las semanas previas. Este achicamiento elimina, por ahora, el incentivo para operaciones especulativas como los “rulos” financieros.

Sin embargo, las tasas de interés se mantuvieron en niveles prohibitivos: la caución cerró en 66%, la “repo” interbancaria en 85%, y los adelantos en descubierto cerca del 100%. Los bancos, además, reclamaron al Banco Central (BCRA) una baja de encajes, que siguen en el 53%, para aliviar la falta de liquidez.

Entre la estrategia de Caputo y la desconfianza residual

Los analistas se dividen entre quienes creen que esta situación forma parte de la estrategia del ministro Luis “Toto” Caputo y quienes la interpretan como una muestra de desconfianza persistente. En lo inmediato, el ministro enfrenta una semana clave: deberá renovar deuda por $12 billones, buena parte en bonos “dólar linked”. Una eventual baja del tipo de cambio podría reducir el costo del “rolleo” y mejorar las condiciones de financiamiento.

El riesgo país, por su parte, cayó con fuerza también el día lunes —de más de 1.000 a 650 puntos básicos—, impulsando las cotizaciones de los bonos soberanos. La reacción fue celebrada tanto por inversores locales como por grandes fondos internacionales, que habían apostado a la estabilidad del programa libertario.

Entre los ganadores también figura Santiago Bausili, presidente del BCRA, cuya intervención en el mercado de futuros generó ganancias estimadas en $500.000 millones tras la caída de las cotizaciones. Aunque las pérdidas acumuladas en el año aún rondan los $300.000 millones, el resultado del lunes dio un respiro a la autoridad monetaria.

El otro gran beneficiado fue el inversor estadounidense Scott Bessent, quien, según estimaciones privadas, obtuvo un rendimiento del 16% en dólares en un solo día, lo que en términos anualizados equivale a una ganancia del 5.700%. Su respaldo al equipo económico argentino —y particularmente a Caputo— fue motivo de debate en la prensa norteamericana, incluido un editorial crítico de The New York Times.

El debate por el tipo de cambio y las reservas

La discusión sobre el futuro del régimen cambiario volvió al centro de la escena. Mientras algunos celebran la estabilidad lograda, varios economistas advierten que el Gobierno debería dejar flotar el peso y acumular reservas. “Sería el momento oportuno para remover los controles y fortalecer la posición externa”, planteó Héctor Torres, ex representante argentino ante el FMI. En la misma línea, Miguel Kiguel sostuvo que “el Gobierno no debería salir a defender el tipo de cambio si se acerca al techo de la banda; eso le daría oxígeno a la economía”.

Los bancos internacionales también se pronunciaron. El Bank of America prevé una estabilización del dólar en torno a $1.450 y una baja gradual de las tasas. En cambio, el JP Morgan, donde se formó Caputo, advirtió que “el sistema de bandas carece de flexibilidad ante shocks” y podría requerir “ajustes para restaurar la acumulación de reservas”.

Por ahora, el Gobierno no planea medidas drásticas. Los analistas creen que la prioridad de Caputo es atravesar sin sobresaltos el cierre del mes y la licitación del Tesoro. Pero advierten que la tregua cambiaria podría ser pasajera: el ingreso de divisas por exportaciones sigue bajo, y el agro ya adelantó ventas por más de u$s7.000 millones.

En ese contexto, los mercados siguen atentos a los próximos pasos del Gobierno. Si bien el triunfo electoral de Milei trajo alivio y mejores precios para los activos argentinos, el desafío de fondo —consolidar la confianza y fortalecer las reservas— todavía está lejos de resolverse.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto