El PJ (también) milita hacia adentro la boleta de “Juan”

POLÍTICAAgencia 24 NoticiasAgencia 24 Noticias
multimedia.normal.be64d48e24a1ed7d.bm9ybWFsLndlYnA%3D

Con el manual de la vieja escuela, los afiliados del PJ fueron alcanzados por una carta firmada por Juan Schiaretti, pidiéndoles, en primera persona, el voto y el esfuerzo para que familiares, vecinos y amigos respalden su candidatura, que -explicó- “excede una elección o una banca”.

Schiaretti manifiesta, en la misiva, su preocupación por “la patria”, a la que advierte en problemas; su convicción de que los sacrificios realizados por los argentinos en los últimos tiempos no están (aún) condenados a caer en saco roto; y su compromiso para evitar “un nuevo fracaso para nuestro país”.

A la par, se muestra optimista por el acompañamiento de los seis gobernadores que integran Provincias Unidas, y destaca “Es tiempo de estar unidos (…) de dejar las ambiciones personales de lado”.

En el marco de división que estas elecciones plantean para el oficialismo provincial, no cuesta advertir que buena parte de la misiva repartida por el justicialismo tiene el propósito de evitar la fuga de votos del cordobesismo hacia Defendamos Córdoba.

De hecho, no pierde la oportunidad de recordar el camino desandado junto al creador de la marca Unión por Córdoba. “Junto a mi compañero José Manuel de la Sota mantuvimos a Córdoba siempre de pie, enfrentando con firmeza y convicción los ataques que intentaron poner a nuestra provincia de rodillas. ¡Y no pudieron con Córdoba!”, reza un pasaje que apela a destacar el rol antagónico de Córdoba respecto del Gobierno Nacional; en su momento, en manos del kirchnerismo, y hoy frente a la gestión libertaria de Javier Milei. 

La aclaración no es superflua, sino que apunta a convencer de que la real oposición es la boleta del Centro Cívico, incluso por encima de otros espacios que han planteado, desde hace tiempo, posiciones más abiertamente confrontativas con la Casa Rosada.

La carta de Schiaretti, militando el voto dentro de la propia estructura partidaria del justicialismo cordobés, bien puede ser reacción a una situación que, desde hace semanas, advierten terceras y cuartas líneas de la gestión provincial y municipal: en las estructuras habría más voto “nostálgico” del que se anima a confesar.

Desde la llegada de Martín Llaryora al poder -e incluso antes-, el cordobesismo se ha preocupado por romper el molde del justicialismo y erigirse como un espacio transversal, que avanza más allá de los márgenes de una alianza con epicentro en el PJ.

Después de un trasvasamiento generacional ajustado en el 2023, el cordobesismo se reafirmó en la decisión de abrir el juego a nuevos espacios, potenciando tensiones hacia adentro del PJ, que ahora empezarían a aflorar.

Los estrategas de esa apertura probablemente se duelan de que la reacción llegue justo ahora, cuando la alianza UCR-PRO acaba de deflagrar, dejando vacante un electorado de centroderecha que, sin demasiados esfuerzos, podría convocar el oficialismo provincial.

En cualquier caso, las urgencias marcan otro rumbo. Provincias Unidas es una marca nueva, integrada por distintos partidos, que ofrece la oportunidad de capturar al menos una buena porción del electorado vacante, si consigue erigirse como una alternativa real. La duda es cómo se sintetizarán las tensiones internas de un PJ, que ya no tendrá una sola canasta en octubre.

CON INFORMACION DE DIARIO ALFIL.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto