Mercado financiero y elecciones: el Banco Central enfrenta la neblina previa al voto

ECONOMÍA Agencia de Noticias del Interior
caputo-dolar-banco-centraljpg
  • La volatilidad financiera y cambiaria se intensificó en Argentina antes de las elecciones, generando confusión entre inversores y asesores.
  • El equipo económico, al adelantar medidas monetarias, provocó una pulseada con los bancos que elevó tasas de interés reales y la volatilidad del mercado de pesos.
  • El BCRA reabrió ventanillas de liquidez diaria y el Tesoro renovó vencimientos, buscando estabilidad hasta después del 26 de octubre.
  • Las tasas elevadas afectaron principalmente instrumentos de mediano y largo plazo, encareciendo el crédito y desacelerando la actividad económica.
  • El dólar se mantuvo relativamente estable, mientras los soberanos “hard dollar” reflejan un comportamiento alineado con mercados emergentes.
  • La desaceleración inflacionaria, reflejada en un IPC núcleo del 1,5%, generó alivio parcial, pero el oro y la plata se destacan como refugios frente a la pérdida de poder adquisitivo de las monedas.

La escena financiera y cambiaria argentina de las últimas semanas ha generado sorpresa y confusión, aunque en el mundo económico aseguran que era previsible en la antesala de las elecciones. Desde fines del mes pasado, inversores, asesores y consultores han intensificado encuentros presenciales y virtuales, discutiendo escenarios que pocos esperaban ver tan temprano. Según operadores, reina una especie de “manto de neblina” sobre la dirección que tomará el mercado, con especial atención al tándem Caputo-Bausili y las decisiones del Banco Central (BCRA) y el Tesoro.

La combinación de medidas y contramedidas monetarias ha contribuido a un clima de incertidumbre. Algunos asesores atribuyen la volatilidad del dólar a la preocupación de los propios funcionarios económicos, más que a la reacción de los ahorristas, lo que refleja la complejidad del momento. El equipo económico, al abrir prematuramente la “caja de Pandora”, generó una pulseada con los bancos que elevó las tasas de interés reales y aumentó la volatilidad del mercado de pesos.

Operadores destacan que, a pesar de la aparente ventaja del BCRA en las pantallas de futuros y spot, los principales afectados son los ahorristas y empresas que no logran acceder a las oportunidades del mercado. A estos niveles de tasas, pocas alternativas de inversión son atractivas, y la incertidumbre complica la toma de decisiones, aunque se considera transitoria hasta después de las elecciones.

Entre las acciones recientes, el BCRA reabrió una ventanilla de liquidez diaria para que los bancos estacionen excedentes y reduzcan la volatilidad de la tasa corta, mientras que el Tesoro enfrentó licitaciones para renovar vencimientos por $15 billones. El rollover alcanzó solo el 64%, con $9,1 billones asegurados para después del 26 de octubre. La operatoria de pases y el manejo de la curva de tasas nominales y reales han afectado principalmente los instrumentos de mediano y largo plazo, mientras los tramos cortos de LECAP han evitado caer en terreno negativo.

En materia cambiaria, el BCRA intervino en contratos que superaban el techo de la banda cambiaria, logrando cierta estabilidad, mientras los soberanos en “hard dollar” mantienen un desempeño alineado con mercados emergentes, con menor exposición a la volatilidad electoral. Analistas coinciden en que las reservas permiten cumplir compromisos, aunque el verdadero riesgo radica en la gestión de pesos y la liquidez local.

El aumento de encajes dispuesto por el BCRA, que absorbió $6 billones adicionales de los bancos, buscó contener la oferta monetaria, encarecer el crédito y limitar el impacto del dólar en la inflación. Esta política generó efectos negativos sobre la actividad económica, que desde febrero mostraba estancamiento, y presionó a la baja la demanda de crédito. Sin embargo, la desaceleración inflacionaria, reflejada en un IPC de julio con núcleo del 1,5%, ha sido celebrada por algunos economistas, aunque reconocen que la atención del mercado sigue centrada en las tasas de interés y la liquidez.

A nivel internacional, estudios como el del Deutsche Bank muestran que ninguna economía ha mantenido de manera sostenida una inflación del 2%, salvo algunos casos como Suiza, Alemania y Japón, lo que refuerza la percepción de que las monedas tradicionales pierden poder adquisitivo con rapidez. En contraste, el oro y la plata han protegido y multiplicado el valor real de los activos, resaltando su rol como refugio en un contexto de alta volatilidad.

En síntesis, el mercado argentino enfrenta semanas críticas previas a las elecciones, con un BCRA que maniobra entre tasas, liquidez y dólar, mientras inversores y operadores intentan descifrar un panorama donde la incertidumbre política y económica se entrelaza, y donde las decisiones tomadas hoy impactarán directamente en la estabilidad de los próximos meses.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto