El peronismo cordobés cerró filas contra CFK y reafirmó que no jugará en el PJ
POLÍTICAAgencia 24 NoticiasCristina Kirchner se lanzó como candidata a presidenta del PJ nacional y en el partido pocos creen que haya interna con el gobernador riojano Ricardo Quintela, además de suponer que el bonaerense Axel Kicillof y los intendentes de la provincia no enfrentarán a la jefa del espacio. Todavía falta para que eso se resuelva.
En Córdoba miran de lejos, pero no tanto, el proceso que decantó rápidamente en la conducción del principal partido de la oposición a Javier Milei en manos de la expresidenta, un lugar que a CFK le permitirá manejar la lapicera para las candidaturas en las elecciones de medio término del 2025 y para la postulación presidencial del peronismo del 2027, aun con el antecedente del fracaso de la su última jugada con Alberto Fernández.
Luego de que peronistas cordobeses que no integran el oficialismo de Hacemos Unidos salieran a bancar a CFK, entre ellos el intendente de Leones, Fabián “Pipi” Francioni, el legislador provincial Fabián Francioni y la diputada nacional Gabriela Estévez, jefa local de La Cámpora, el schiarettismo recordó con duras palabras la línea infranqueable que hay entre el PJ Cordobés y el movimiento a nivel nacional, a quien consideran “secuestrado” por el kirchnerismo. En todo caso, el juego de Cristina reafirma la mirada de la cooptación K del partido de Perón y le permitió al peronismo provincial reafirmar que no tendrá participación en lo que la ex mandataria pretenda armar.
A las horas salió el llaryorismo de la mano del presidente del bloque de legisladores de Hacemos Unidos, Miguel Siciliano, y el ministro de Gobierno de Martín Llaryora, Manuel Calvo. Ambos en la misma línea: “El peronismo de Córdoba hace años que no participa de la vida interna del PJ nacional porque somos una provincia que nada tenemos que ver con el kirchnerismo”. Es real: aunque el ex mandatario Juan Schiaretti estuvo en forma virtual cuando Alberto Fernández fue ungido, en pandemia, jefe del PJ, desde antes de la Resolución 125 de las retenciones móviles, el kirchnerismo es para el cordobesismo el adversario a repeler.
La senadora Alejandra Vigo, esposa de Schiaretti y presidente del PJ provincial, y el diputado nacional Carlos Gutiérrez, mano derecha del “Gringo” en el Congreso, fueron la voz del exgobernador ante las novedades. Schiaretti hace rato está armando un espacio por el andarivel del medio, con dirigentes de centro derecha y “libre de kirchnerismo”, y a esos fines le sirve una Cristina fuerte para marcar los dos extremos del polo y, eventualmente, para salir con la ambulancia a recoger al justicialismo que no se encolumne con la “jefa” y sumarlo a Hacemos Argentina, su criatura.
Más allá de las expresiones públicas, hay un lamento por la “oportunidad perdida” de un “verdadero recambio generacional” en el PJ, que ciertamente no iba a ser con el “Gitano” Quintela, aunque el riojano sí daba una impronta federal y no tan ambacéntrico al esquema peruca. Una versión contrafáctica en el peronismo cordobés más joven, asentado en la ciudad de Córdoba, señala también que con la presidencia partidaria de Cristina Fernandez se corta toda posibilidad de alguna interacción federal con el PJ nacional que podría haber venido de la mano del gobernador riojano y de su armado con otros mandatarios.
Ayer Vigo fue contundente con el rechazo. “El peronismo de Córdoba hace años que no participa de la vida interna del PJ nacional porque somos un distrito en el que nada tenemos que ver con el kirchnerismo. No lo hicimos cuando presidía el PJ Alberto Fernández, el presidente de la Nación violento e incapaz elegido por Cristina. Y tampoco debemos hacerlo ahora, en este ensayo desesperado que quiere ejecutar CFK que, cuando fue Presidenta, dinamitó los canales de diálogo y la buena convivencia entre los argentinos”, escribió la senadora en sus redes sociales. La ex presidenta, en la carta donde asume que irá por la conducción partidaria, habla de “cinco provincias” gobernadas por el PJ: Buenos Aires, Catamarca, Formosa, La Pampa, La Rioja y Tucumán. Claramente excluye a Córdoba, de modo que la negación es mutua.
Los gestos anti Cristina abundaron en el schiarettismo. El diputado nacional Florencio Randazzo, hombre del PJ bonaerense, anunció su renuncia a la afiliación al PJ, aunque hace tiempo que se presenta a elecciones por fuera del partido y no tiene sensatamente gran talla en el conglomerado peronista. De hecho, quiso ser presidente de la Cámara de Diputados cuando se discutió el tema al asumir Milei.
Gutiérrez resaltó que CFK no hizo nunca una autocrítica y salió a marcar la cancha por si alguno piensa en mirar al Patria. Se sabe que el senador Wado de Pedro es quien se encarga del diálogo con los sectores no K del peronismo y se entiende que la también ex vicepresidenta tendrá que buscar patas no bonaerenses para sustentar su proyecto. Ayer se reunió con el sanjuanino José Luis Gioja y a futuro tendría una foto con su adversario interno, Sergio Uñac. No falta quien resalte el reciente encuentro en Carmen de Areco, provincia de Buenos Aires, entre el camporista De Pedro y el exgobernador salteño Juan Urtubey para la presentación del libro “Arraigo: hacia un federalismo del siglo XXI” de Paco Durañona. Hace un año, el salteño y el mercedino habían coincidido en un encuentro peronista en Mendoza, junto a la también camporista Anabel Sagasti, algo que enojó bastante a Schiaretti, que estaba armando con Urtubey. Cerca del marido de Isabel Macedo resaltan que el exgobernador, que apoyó a Sergio Massa en el balotaje frente a Milei, tiene buena onda con todos, y deslizan que su intención es estar en una lista legislativa el año que viene. Algunas miradas conducen a la diputada Natalia de la Sota, pero la hija del exgobernador mencionado hoy como anti K por Gutierrez no abandonará el buque cordobesista, aunque tenga sus matices y todavía ninguna certeza de si Schiaretti y Llaryora le darán la posibilidad de repetir la banca en Diputados.
CON INFORMACION DE DIARIO ALFIL, SOBRE UNA NOTA DE BETTINA MARENGO.