Freno inesperado para la “inocencia fiscal”: el proyecto estrella del Gobierno se empantana en Diputados

• El ambicioso proyecto del Gobierno para regularizar fondos no declarados, bajo el nombre de “presunción de inocencia fiscal”, se frenó antes de arrancar. A más de un mes de su presentación, aún no se convocó a comisiones en Diputados y el oficialismo no logra reunir los apoyos necesarios.
• La iniciativa, que incluye cambios al Régimen Penal Tributario y un régimen simplificado de Ganancias, enfrenta resistencias por su manejo político y por aspectos polémicos como permitir consumos sin justificar el origen del dinero. Aunque tiene el respaldo de 13 gobernadores, los bloques dialoguistas reclaman mayor seriedad en el tratamiento legislativo y cuestionan la falta de negociación.
• Por ahora, el proyecto estrella de la Casa Rosada permanece congelado, sin fecha clara para avanzar.

La Casa Rosada había apostado fuerte a avanzar con rapidez en la discusión del proyecto de ley de “presunción de inocencia fiscal”, una iniciativa que busca seducir a los argentinos con dólares “en el colchón” a regularizar su situación patrimonial. Pero tras el anuncio con bombos y platillos del vocero presidencial, Manuel Adorni, el plan estrella del oficialismo encontró una realidad mucho menos entusiasta en la Cámara de Diputados: a más de un mes de su presentación, ni siquiera se convocó a una primera reunión de comisión.

El proyecto, que incluye una profunda reforma del Régimen Penal Tributario y un nuevo esquema simplificado del Impuesto a las Ganancias, está empantanado en la comisión de Presupuesto, presidida por José Luis Espert. Aunque La Libertad Avanza consiguió el respaldo de 13 gobernadores para una parte de la iniciativa, el dictamen sigue lejos. Los números no cierran sin aliados, y los puentes de diálogo parecen estar rotos o, al menos, sin uso.

Fricciones internas y aliados distantes

Para llevar el proyecto al recinto, el oficialismo necesita 25 firmas en la comisión de Presupuesto, pero apenas cuenta con 6 propias. A ellas se sumarían los votos del PRO, el MID, algunos radicales y partidos provinciales. Sin embargo, la clave está en bloques menores como Encuentro Federal, Democracia para Siempre y la Coalición Cívica, donde las tensiones con el presidente de la Cámara, Martín Menem, y la desconfianza hacia la conducción del oficialismo generan un clima enrarecido.

En diálogo con Infobae, referentes de la Coalición Cívica y Democracia para Siempre cuestionaron el manejo discrecional de la agenda por parte de Espert y reclamaron que ni siquiera se trató el Presupuesto. “Cajonera todo y después te vienen de apuro. Así no funciona”, criticó un radical disidente, dispuesto a debatir, pero no a firmar un dictamen “exprés”.

Jubilaciones, discapacidad y vetos que pesan
Además de la interna legislativa, el clima político general complica aún más el panorama. Desde Encuentro Federal advirtieron que los recientes vetos presidenciales, como el aumento de las jubilaciones y la emergencia en discapacidad, podrían afectar la predisposición al diálogo. “Todo eso suma ruido en un contexto donde no hay puentes de negociación”, explicaron desde el bloque.

Sospechas de maniobra y dudas de fondo

Aunque en las comisiones de Legislación Penal y Legislación General el oficialismo tendría más margen de maniobra —ya que parte del proyecto replica un texto que ya fue dictaminado en 2024—, desde la oposición denuncian que se trata de una estrategia para forzar un dictamen conjunto y evitar el debate profundo del resto de la ley.

El proyecto contempla una suba drástica de los montos mínimos a partir de los cuales se puede investigar a un contribuyente por evasión fiscal: de $1,5 millones a $100 millones en el caso de evasión simple, y de $15 millones a $1.000 millones para la evasión agravada. Además, reduce de cinco a tres años los plazos para que el organismo recaudador (ARCA) pueda actuar sobre impuestos no declarados.

El punto más polémico, sin embargo, es la creación de un régimen simplificado de Ganancias que permitiría a contribuyentes con ingresos no justificados —pero inferiores a los $1.000 millones— realizar consumos personales sin ser investigados por el origen de los fondos. Por ejemplo, se podría comprar un vehículo sin declarar el dinero con el que fue adquirido.

De la urgencia al freezer

Lo que comenzó como una iniciativa prioritaria para la Casa Rosada, con promesas de celeridad parlamentaria, quedó atrapado en un combo de desconfianzas políticas, fallas en la negociación y malestar por el manejo unilateral de la agenda. Por ahora, el proyecto de “inocencia fiscal” está lejos del recinto y más cerca del congelador legislativo. Y con una semana corta por delante y sin convocatorias formales, todo indica que el debate se postergará —al menos— hasta fines de junio.