No es secreto que Adolfo Domínguez tiene un largo vínculo con la ecología. Este se traduce en sus colecciones de indumentaria, sobre todo, en el uso de materiales nobles o reciclados junto al trabajo de piezas atemporales. También, en las campañas realizadas y sus lemas, por ejemplo: “Compra ropa que dure más que las modas”, de la colección “Ropa Vieja”. El compromiso con el medio ambiente está en su ADN.
En el camino en pos de innovar y simplificarse para disminuir la huella de carbono y que sus fragancias sean cada vez más sustentables, da un paso más allá en el packaging de sus perfumes Bambú y Agua de Bambú convirtiéndolos en reciclados, reciclables y reutilizables. Estas líneas son las dos últimas en el portfolio de Adolfo Dominguez que faltaban para convertirse en una marca comprometida con la sustentabilidad y sostenibilidad en toda su colección.
Tan natural
La naturaleza es la principal inspiración para las fragancias. Con la misión de respetar a la madre Tierra y honrar su promesa de sustentabilidad, el último restyling de Bambú y Agua de Bambú tiene como su eje central lo sustentable. Abarca toda la presentación, fabricación, materialidad y comunicación en su totalidad de los universos de Adolfo Domínguez Perfumes.
Fuente: Marie Clare