Se "empiojó" totalmente la relación entre Luis Juez y el Gobernador Llaryora

Juan Palos

La disputa política en Córdoba se intensificó esta semana, tras un intercambio de acusaciones entre el oficialismo provincial y el senador nacional Luis Juez. El origen del conflicto fueron las declaraciones de Juez, quien denunció presuntos sobreprecios en obras públicas y acusó al gobierno de Martín Llaryora de "repartirse la plata con empresas amigas".
Durante una entrevista radial, Juez afirmó: "Se construyen obras millonarias con mecanismos corruptos, repartiendo contratos entre tres o cuatro empresas y simulando competencia. No soportan una auditoría real, carecen de transparencia y control".
La respuesta del oficialismo no se hizo esperar. En un acto en La Falda, Llaryora descalificó a Juez sin mencionarlo directamente: "Algunos piensan que cuanto peor, mejor. No vamos a regalar la estabilidad de Córdoba. Aquí se hacen y controlan obras, y eso molesta a quienes nunca hicieron nada", sostuvo.
Facundo Torres, vicepresidente provisorio de la Unicameral, fue aún más incisivo, acusando a Juez de llevar a cabo "una campaña sucia que perjudica a los cordobeses". En sus redes sociales, dijo: "Luis Juez siempre encuentra la manera de congraciarse con el poder nacional de turno. Esa es su única coherencia". Además, lo calificó de "cipayo" y critico su relación con Javier Milei, señalando que "su sumisión al presidente avergüenza" y recordando que "nunca se escuchó su voz cuando el Gobierno nacional retiene recursos de la provincia".
Torres defendió el modelo de obra pública en Córdoba, resaltando que "todo se hace conforme a la ley, con licitaciones transparentes y controles adecuados", y recordó que el Tribunal de Cuentas de la provincia, donde se revisan las obras, está en manos de la oposición, con mayoría del sector de Juez.
El enfrentamiento se produce en un momento crítico, justo antes del receso de invierno, cuando Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires —dos de los principales emisores de turistas— iniciarán sus vacaciones y en medio de un fuerte debate sobre el financiamiento nacional a las provincias.