"Cristina libre": el peronismo se moviliza y redefine su eje político tras el fallo de la Corte

• La condena firme a Cristina Fernández de Kirchner reactivó al kirchnerismo y aceleró una reorganización interna en el peronismo.
• Eduardo “Wado” de Pedro lidera la campaña “Cristina libre” y plantea esa consigna como condición para un futuro gobierno.
• Se prepara una movilización masiva hacia Comodoro Py en apoyo a la expresidenta.
• De Pedro llamó a la unidad del peronismo y cuestionó al gobernador Axel Kicillof por priorizar su armado electoral.
• El PJ mantiene reuniones con intendentes, la CGT y gobernadores para consolidar una respuesta política.
• La causa Vialidad y el decomiso millonario impulsan el discurso de “persecución judicial” en el kirchnerismo.
• “Cristina libre” busca ser más que una consigna: el eje de una nueva etapa del peronismo.

La reciente ratificación de la condena contra Cristina Fernández de Kirchner por parte de la Corte Suprema reavivó la mística kirchnerista y catalizó un proceso de reorganización interna en el peronismo. En este contexto, se gesta una movilización masiva desde la residencia de la expresidenta en Monserrat hasta los tribunales de Comodoro Py, convocada como respuesta política al fallo judicial que condena a la exmandataria a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.

El encargado de ponerle voz y estrategia a esta nueva etapa fue el senador nacional Eduardo “Wado” de Pedro, uno de los dirigentes más cercanos a Cristina Kirchner. En declaraciones a Radio 10, De Pedro aseguró que “la primera condición que tendrá el próximo gobierno será que Cristina quede en libertad”. La frase no solo fue leída como una consigna política sino como el punto de partida de una nueva hoja de ruta dentro del Frente de Todos —ahora profundamente fragmentado— en busca de unidad frente a lo que consideran una persecución político-judicial.

Reorganización y épica

De Pedro, además de liderar la campaña “Cristina libre”, se mostró activo en las reuniones preparatorias para la movilización prevista para el miércoles, aunque su realización podría depender de si los tribunales conceden prisión domiciliaria a la expresidenta antes de esa fecha. “Lo que han hecho es despertar esa fibra más sensible, que en el peronismo genera una épica. Nos vamos a organizar muchísimo mejor y vamos a enfrentar no solo las elecciones de 2025 y de 2027, sino también una fuerte campaña para que Cristina quede libre”, sentenció.

El concepto de "libertad", utilizado durante la campaña de Javier Milei, fue resignificado por De Pedro, quien anticipó que será apropiado por el peronismo en su nueva etapa: “Vamos a usar la palabra libertad al lado de la palabra Cristina. Ese concepto nos va a marcar una agenda de lucha electoral, de planificación”.

Interna expuesta

El llamado a la unidad, sin embargo, no llegó exento de pases de factura. En medio de las tensiones internas del movimiento, De Pedro envió un mensaje directo al gobernador bonaerense Axel Kicillof, con quien mantiene diferencias respecto al rumbo del espacio. “Hay que ser un poco más humildes, escucharnos un poco más y empezar a unificar esta fuerza política”, remarcó el senador, en clara alusión al armado que Kicillof impulsa bajo el nombre Movimiento Derecho al Futuro, con aspiraciones presidenciales para 2027.

La disputa no es menor. Mientras Kicillof intenta consolidar su propio liderazgo con el respaldo de intendentes y sindicatos, el núcleo duro del kirchnerismo —representado por La Cámpora, Máximo Kirchner y referentes históricos del espacio— apuesta a reconstruir su poder político desde la defensa de la figura de Cristina Kirchner.

De Pedro se mostró convencido de que la gravedad institucional del fallo contra la expresidenta debería ser suficiente para desactivar las diferencias internas. “No está en juego un legislador más o menos. Esto marca un antes y un después. Es una etapa de la historia que requiere que estemos todos juntos, coordinados y pensando cómo volver a generar confianza”, advirtió.

Reuniones clave y respaldo territorial

El PJ se encuentra en plena efervescencia organizativa. Durante la semana pasada, se realizaron encuentros en la histórica sede de Matheu con la participación de Máximo Kirchner, Sergio Massa, Juan Grabois, Pablo Moyano y más de 250 intendentes e intendentas de todo el país, quienes expresaron su rechazo unánime al fallo.

Para el martes, están previstas reuniones claves con la CGT y los gobernadores. El objetivo es claro: consolidar una postura común y definir los pasos a seguir en el frente judicial y político. La posibilidad de una movilización unificada es vista por algunos sectores como el puntapié de una nueva etapa de militancia activa que sirva, además, para reactivar la base electoral peronista de cara a 2025.

Una causa que reordena

En paralelo, desde el entorno de Cristina Kirchner no se han emitido declaraciones públicas tras la ratificación de la condena, aunque sí se sabe que su defensa trabaja para frenar el proceso de decomiso que ya activó la Justicia Federal, con un reclamo patrimonial por más de $84.000 millones. Este nuevo frente judicial añade presión al escenario y refuerza la narrativa de “persecución” que impulsa el kirchnerismo.

En definitiva, la causa Vialidad no solo volvió a poner en el centro de la escena a Cristina Kirchner, sino que también funcionó como un catalizador para la reorganización de un peronismo golpeado y dividido. El resultado, por ahora, es una consigna clara y unívoca que volverá a escucharse en las calles: “Cristina libre”. Para el kirchnerismo, no se trata solo de una consigna de resistencia, sino del punto de partida para un nuevo ciclo político.