Mercado financiero argentino: altas tasas y expectativas de reactivación hacia fin de año

ECONOMÍA Agencia de Noticias del Interior
596054
  • El mercado accionario argentino alcanzó su pico en enero 2025, luego comenzó una toma de ganancias en un contexto económico difícil y con dólar en alza.
  • El acuerdo con el FMI, recomposición de reservas y salida del cepo estabilizaron el mercado y redujeron la inflación.
  • Las tasas de interés en pesos subieron a casi 50% anual, con plazos fijos al 34%; las tasas en dólares rondan el 5%.
  • Se espera que las tasas sigan altas porque el dólar no bajará fácilmente al piso de la banda cambiaria.
  • La macroeconomía enfrenta menor recaudación y ajustes fiscales, afectando retenciones a soja y maíz.
  • Bonos en pesos a 5 años ofrecen retornos atractivos (27,5% anual) y son la mejor opción frente a bonos en dólares.
  • La bolsa estadounidense está plana y nuevas leyes podrían gravar inversiones extranjeras, complicando la renta en dólares.
  • La devaluación global del dólar y altas tasas locales hacen que invertir en pesos sea más conveniente.
  • Se aconseja mantener inversiones en pesos hasta que el mercado accionario repunte hacia fin de año, con potencial de ganancias superiores al 50% en dólares.

El mercado accionario argentino tocó su punto máximo en enero de 2025, coincidiendo con el pago de amortización y renta de los bonos soberanos en dólares. Desde entonces, los inversores iniciaron una toma de ganancias en un contexto económico complicado, marcado por bajas reservas y un dólar que buscaba alcanzar nuevos máximos.

El acuerdo con el FMI, la recomposición de reservas y la salida del cepo cambiario lograron estabilizar el mercado, con el dólar ubicado en el centro de la banda cambiaria y una inflación en fuerte descenso. Sin embargo, la demanda de pesos elevó las tasas de interés activas a cerca del 50% anual en moneda local, mientras que las tasas pasivas también subieron: los plazos fijos en pesos ofrecen alrededor del 34% anual y en dólares cerca del 5%.

El mercado espera que las tasas se mantengan elevadas, dado que para aumentar la oferta de pesos el dólar debería bajar hacia el piso de la banda, una opción poco probable en el corto plazo. Esta dinámica golpea especialmente a los comercios, que enfrentan costos en alza y ventas débiles, llevando a rentabilidades negativas y cierres de negocios.

A nivel macroeconómico, la recaudación tributaria se redujo, lo que obliga a un ajuste en el gasto público. Aunque se prevé un resultado fiscal positivo para mayo, esto implica mayores sacrificios y limita la posibilidad de mantener reducciones temporales en retenciones a cultivos clave como soja y maíz.

En materia financiera, la reciente colocación de un bono en pesos a cinco años fue bien recibida, con una tasa de retorno del 27,5% anual y una inflación esperada inferior al 20%, lo que podría generar ganancias atractivas para los inversores. Con elecciones provinciales y legislativas en los próximos meses, se estima que el movimiento fuerte en los mercados recién comenzará a partir de agosto.

Las mejores oportunidades se concentran en instrumentos en pesos, con LECAPs y Boncaps ofreciendo rendimientos superiores al 30% anual. Por su parte, los bonos soberanos en dólares pierden atractivo: para equiparar sus rendimientos con los bonos en pesos, la tasa de devaluación debería superar el 12%, un escenario que no parece probable.

A nivel internacional, la bolsa estadounidense mantiene un comportamiento plano, mientras que una nueva legislación que grava los ingresos enviados a países extranjeros podría afectar la rentabilidad para inversores internacionales. Esta medida, con impuestos que podrían superar el 20%, plantea un panorama más restrictivo para la inversión en dólares.

El contexto global de devaluación del dólar invita a repensar las inversiones en esta moneda, mientras que localmente, las altas tasas en pesos funcionan como un freno a la depreciación del peso, con el dólar intentando acomodarse dentro de la banda cambiaria.

En conclusión, la inversión en pesos emerge como la opción más sólida en medio de la incertidumbre, con una macroeconomía ordenada pero una microeconomía que aún sufre. El financiamiento al sector privado ha crecido, pero la morosidad empieza a manifestarse. Los especialistas aconsejan mantenerse en instrumentos en pesos hasta que el mercado accionario retome fuerza hacia fin de año, con la expectativa de superar los máximos de enero y obtener ganancias en dólares superiores al 50%.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto