Ambientalistas denunciaron la obra de la autovía que atraviesa el valle de Punilla

Es martes 16 de junio y, desde temprano, Córdoba es “tendencia” en las redes sociales. Después de (casi) catorce años -según indican los medios locales- volvió a nevar en la capital de la provincia y en las Sierras. “Córdoba blanca”; “Nevada histórica”, titulan los portales. Son muy pocos, en cambio, los que hacen referencia a la denuncia que presentaron ayer, martes 15 de junio, contra la obra de la autovía alternativa a la Ruta Nacional N°38, que atraviesa el valle de Punilla, por “violar las salvaguardas ambientales y de transparencia”.

Mientras la Secretaría de Ambiente de la Provincia resuelve si otorga “licencia ambiental” al proyecto oficial (tal cual fue planteado o con modificaciones y/o requerimientos); Alfredo Curutchet (economista), Carlos Vicente (abogado), Medardo Ávila Vázquez (médico) y Pablo Sigismondi (géografo) plantean que la construcción de la autovía de Punilla (una ruta de cuatro carriles de 43,5 kilómetros de extensión que unirá la variante Costa Azul -en el ingreso a Villa Carlos Paz- con la norteña ciudad de La Cumbre) “atenta contra el riesgo climático y la conservación de la diversidad biológica y los hábitats naturales”.}

“El Valle de Punilla, donde estaría situada la autovía, es el lugar de la Provincia con mayor vulnerabilidad ambiental, debido a los desmontes, los incendios y el desarrollo inmobiliario especulativo sin planificación de servicios esenciales, como sistemas cloacales adecuados. Este sector sufre un proceso de crisis hídrica con eutrofización e hipereutrofización del Dique San Roque, debido a volcamiento de aguas servidas al lago durante muchos años, sin recibir un proceso de purificación adecuado. Este dique, que acumula el agua desde donde nace el río Suquía, es la fuente de agua para el consumo del 40% de la población de la Provincia de Córdoba. La polución del Dique San Roque y su interrelación con la autovía en cuestión no han sido consideradas en ningún momento en el Estudio de Impacto Ambiental (EsIAyS) presentado por la Secretaría de Ambiente del Gobierno provincial”, apuntan en su denuncia de 17 páginas.

El tema no es nuevo. El 19 de mayo pasado, un grupo de más de 860 cordobeses redactó una Carta Abierta al Primer Mandatario, Alberto Fernández, para intentar frenar la construcción de la autovía por considerar que afectará el ambiente y pone en peligro el abastecimiento de agua para buena parte de la población.

“Nos dirigimos a Ud. preocupados por la concreción del proyecto de construcción de una nueva traza de la Ruta Nacional 38 en su recorrido por el departamento de Punilla. Esta obra destruirá gravemente el ambiente de este territorio, donde se encuentra el manantial de agua para el 40% de los cordobeses. Su recorrido transcurre en un 30% por bosque catalogados como en zona roja, utiliza 21 enormes puentes para atravesar 8 cuencas hídricas que nutren al lago San Roque cuyas aguas ya se encuentran en proceso de severa eutrofización (descomposición) y el impacto que ahora sufrirán terminarán de degradar una región asolada por la falta de cloacas, los desmontes e incendios y la especulación inmobiliaria”, apuntaba el primer párrafo de la carta.

Un mes antes, a fines de abril, se había dado inicio a una audiencia pública ambiental (realizada de modo virtual) que demandó 25 días por la cantidad de personas (más de 500) que participaron. La mayoría de los expositores -de acuerdo a El Diario de Carlos Paz- se mostró en contra del proyecto “que demandará una inversión de 100 millones de dólares y será afrontado mayoritariamente con un crédito internacional y que ha sido cuestionado tanto por su impacto ambiental y porque implica el desplazamiento de medio centenar de familias”.

Infobae se puso en contacto con Caminos de la Sierra, la empresa concesionaria de las rutas de accesos a la ciudad de Córdoba y a través de la cual se ejecutará la obra. Desde la misma indican han cumplimentando todos los trámites administrativos y legales dispuestos por la Ley de Ambiente 10.208 de la provincia de Córdoba y con las salvaguardas ambientales y sociales requeridas por la Corporación Andina de Fomento (CAF).

“Este proyecto cuenta con el consenso institucional de la totalidad de los intendentes y concejos deliberantes (incluso de distintos partidos políticos) de las localidades de la traza”, sostuvieron e indicaron que están a la espera de la resolución de la Secretaría de Ambiente de la Provincia para definir si se les otorga la “licencia ambiental”.

“La construcción de la nueva autovía beneficiará enormemente a los pueblos y ciudades de ese valle turístico, que sufren el colapso en el tránsito durante las temporadas y fines de semanas, y que además es el único de toda la provincia de Córdoba que aún no cuenta con autovía como vía de acceso”, concluyeron.

Los denunciantes, claro está, no opinan lo mismo. “Existe un alto riesgo que este Proyecto termine destruyendo irremediablemente recursos del patrimonio cultural de la región. En el Valle de Punilla y específicamente entre la Pampa de Olaen y el cordón de las sierras se reconoce la existencia de yacimientos arqueológicos y paleontológicos aun desconocidas; incluso algunos asentamientos son considerados entre los más antiguos del país (más de 8000 años de antigüedad para la cultura Ayampitin)”, aseguran y proponen una alternativa sin contraindicaciones ambientales y más económica.

“Realizar el Corredor Bioceánico es posible con otro recorrido que no implica atravesar el Valle de Punilla y que además tiene un menor costo económico. Es posible llegar a Cruz del Eje desde ciudad de Córdoba a través de la Ruta Nacional 9 a Jesús María, por ruta nacional 60 a Deán Funes y por ruta provincial 16 a Cruz del Eje, un recorrido de 187 km, sólo 43 km más que el trayecto vía el Valle de Punilla (ver mapa, donde el trayecto alternativo está marcado en verde). Este trayecto alternativo pasa por zonas llanas o de pequeñas ondulaciones, a través de rutas con trazas existentes que sólo requerirían ser ampliadas y modificadas. Incluso entre Ciudad de Córdoba y Jesús María ya existe una autovía. En resumen, el relieve llano y las rutas y autovías ya existentes hacen que esta traza alternativa sea mucho más económica que la traza vía el Valle de Punilla”.

Fuente: infobae