Precios congelados, consumo frenado y expectativas puestas en una inflación con “1” adelante

ECONOMÍA Agencia de Noticias del Interior
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  • Estabilidad de precios: Las listas de junio muestran pocos aumentos por el dólar estable y el consumo débil.
  • Estrategia empresarial: Las industrias priorizan mantener volumen y bajar costos, no subir precios.
  • Inflación baja: El Gobierno espera un IPC de mayo debajo del 2%, el más bajo desde 2017.
  • Consumo estancado: Las ventas en supermercados siguen flojas; mejora leve en comercios tradicionales.
  • Rebote en cuotas: Solo repuntan rubros financiables como electrodomésticos y textiles.
  • Mensaje oficial: Milei y Caputo buscan mostrar que el ajuste fiscal empieza a rendir frutos.

Con el dólar quieto, un consumo debilitado y sin espacio para ajustes significativos, las primeras listas de precios que comenzaron a circular en junio muestran una marcada estabilidad. La estrategia de las industrias parece clara: sostener volumen, optimizar costos y evitar aumentos que puedan ahogar aún más la demanda.

“Coca Cola llegó con un aumento del 2%, muy por debajo de lo habitual”, contó el gerente de un supermercado a iProfesional, reflejando el tono general del mes. En la industria alimenticia, los incrementos también son puntuales y condicionados a la evolución del tipo de cambio. “Si el dólar no se mueve, nosotros tampoco”, resumió el director de una firma líder del sector.

En ese contexto, algunas compañías buscan ganar eficiencia logística para defender sus márgenes. “Estoy achicando los camiones, revisando recorridos y compartiendo cargas con colegas para reducir costos”, explicó el gerente comercial de una empresa de fiambres y embutidos.

Inflación: la gran apuesta del Gobierno

Mientras tanto, el Gobierno se prepara para anunciar lo que considera una victoria simbólica: una inflación mensual que comience con “1”. Según consultoras como Eco Go y Orlando Ferreres, el índice de mayo rondaría entre el 1,8% y 1,9%, lo que marcaría el dato más bajo desde junio de 2017.

“El equipo económico está convencido de que el sendero descendente se consolida”, explican cerca del ministro Luis Caputo, quien junto al presidente Javier Milei busca capitalizar políticamente el resultado. El objetivo: demostrar que el ajuste fiscal empieza a rendir frutos visibles.

De hecho, el Gobierno no oculta su intención de instalar que “esta vez es distinto”, y que el orden macro se sostiene incluso con inflación en retroceso antes de lo esperado.

Consumo y ventas, sin señales claras de rebote

Sin embargo, en las fábricas de productos de consumo masivo el panorama es más sombrío. El consumo se mantiene débil y, según datos preliminares de la consultora Scentia, las ventas en supermercados y autoservicios no muestran repuntes significativos.

“Hay una leve mejora en comercios tradicionales, como almacenes y autoservicios”, señaló Leonardo Alaniz, director de Scentia. Pero el movimiento fuerte viene de rubros atados a las cuotas: electrodomésticos y textiles repuntan, empujados por la financiación.

En resumen, junio arranca con precios contenidos y la esperanza oficial puesta en un IPC históricamente bajo. Pero detrás del congelamiento, el consumo sigue débil y las industrias hacen equilibrio entre sostener ventas y sobrevivir al ajuste.

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