Federico Furiase: “El Banco Central está saneado y el esquema cambiario es sólido”

• El BCRA prevé alcanzar USD 50.000 millones en reservas para fines de junio.
• Se sumarán ingresos por cosecha gruesa (USD 3.000 millones) y organismos internacionales.
• Furiase afirma que el BCRA está “saneado” y el régimen cambiario es estable, con bandas entre $1.000 y $1.400.
• Destaca retorno a la demanda de pesos, baja de inflación y crecimiento del crédito al sector privado (del 4% al 9% del PBI).
• Se busca formalizar los “dólares del colchón” para ampliar crédito y reservas.
• El fortalecimiento del peso se basa en superávit fiscal, sin emisión y menor riesgo país.

El director del Banco Central (BCRA) en representación del Ministerio de Economía, Federico Furiase, aseguró este lunes que la acumulación de reservas avanza según lo planificado y que el esquema cambiario y monetario del país se mantiene firme, respaldado por un equilibrio macroeconómico sin sobresaltos.

En declaraciones a Radio Mitre, Furiase explicó que la meta de alcanzar los USD 50.000 millones en reservas brutas está prevista para fines de junio y no en mayo, como se había interpretado anteriormente. Esta proyección incluye los ingresos por la liquidación de la cosecha gruesa, que aportaría unos USD 3.000 millones, y los desembolsos de organismos multilaterales, entre ellos el Fondo Monetario Internacional.

“El número puntual de reservas no es lo importante, sino el cambio estructural en el balance del Banco Central. Con la recapitalización, los dólares que ya ingresaron y los que van a entrar, tenemos un BCRA saneado”, afirmó el economista, quien destacó que las reservas líquidas permiten sostener la paridad del peso sin necesidad de intervenciones abruptas.

Furiase explicó que el país opera dentro de un esquema de bandas de flotación implícitas, con un piso cambiario cercano a los $1.000 y un techo de entre $1.300 y $1.400. Este régimen permite, según dijo, mantener la estabilidad sin incurrir en controles o ventas masivas de divisas.

Otro de los puntos centrales fue el retorno de la demanda de pesos, que dejó de verse como un activo en licuación gracias a la desaceleración inflacionaria y la baja de tasas. El crédito al sector privado, aseguró, pasó del 4% al 9% del PBI, en línea con un renovado uso de la moneda local para consumo y ahorro.

Furiase también destacó como objetivo prioritario formalizar los “dólares del colchón” para ampliar las reservas y el crédito. Y aunque algunos bancos privados aún se muestran cautelosos frente al nuevo esquema, el funcionario atribuyó esa reticencia a experiencias pasadas, aunque reconoció un respaldo generalizado de las provincias.

“El fortalecimiento del peso no se sostiene con parches ni controles, sino con fundamentos: superávit fiscal, un Banco Central recapitalizado, sin emisión monetaria, y un riesgo país que bajó de 2.700 a 650 puntos”, concluyó.

En medio de un contexto regional volátil, el mensaje de Furiase apunta a transmitir calma: el Gobierno considera que la estabilidad llegó para quedarse, y que la confianza no se construye con promesas, sino con resultados medibles.