Juan Félix Marteau: “La UIF tiene que dejar de querellar, eso es un invento argentino para que cada gobierno persiga a sus enemigos”
POLÍTICA Facundo Chaves*“La Unidad de Información Financiera tiene que dejar de querellar, eso es un invento argentino para que cada gobierno persiga a sus enemigos”, asegura sin rodeos Juan Félix Marteau, ex Coordinador Nacional para el Combate del Lavado de Activos y la Financiación del Terrorismo y actual presidente de FININT. En diálogo con Infobae, Marteau criticó con dureza el funcionamiento actual del organismo que, según su opinión, ha sido escenario de la politización y el desvío de sus funciones originales.
Las declaraciones fueron realizadas tras la decisión del Gobierno de remover a Ignacio Yacobucci de la presidencia de la UIF, el ente que tiene la misión de luchar contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo. Fue una medida tomada en medio de cuestionamientos a su gestión y a los abultados gastos y viajes permanentes al exterior con importantes comitivas y en primera clase.
“El Gobierno tomó cartas en el asunto tratando de ordenar algo que no funcionaba. Hace más de un año que la UIF es un organismo completamente inútil para cumplir con lo que ordena la ley: combatir el lavado de activos y la financiación del terrorismo”, señaló. Para Marteau, esta crisis se profundizó debido a “la arbitrariedad” en la gestión de los últimos años y a la falta de un protocolo de actuación que asegure transparencia y eficiencia en la lucha contra delitos complejos como el narcotráfico.
En la entrevista, el experto recordó que fue Cristina Kirchner, en 2009, en medio de la pelea contra los medios de comunicación, que vía decreto, le impuso a la Unidad de Información Financiera impulsar acciones penales en los tribunales, invadiendo las funciones específicas de los fiscales y la Justicia. Y luego, la gestión de Mauricio Macri utilizó la misma herramienta sobre sus enemigos políticos. “El Gobierno tiene que derogar ese decreto”, consideró.
Durante esta entrevista, Marteau repasó el origen de los problemas de la UIF, criticó la ineficacia de su gestión reciente y ofreció propuestas concretas para reformar el organismo, incluyendo la eliminación de esa facultad de querellar, algo que califica de “técnicamente incompatible” con su rol de inteligencia financiera. También analizó el impacto de la reciente designación de Paul Starc al frente del organismo y las expectativas que generó este cambio. “Apoyo su designación”, afirmó.
La entrevista a Juan Félix Marteau
- Le pido una reflexión sobre la decisión del gobierno de reemplazar al titular de la UIF.
El Gobierno tomó cartas en el asunto tratando de ordenar algo que no funcionaba así. Hace 12 meses que no funcionaba, básicamente porque la UIF de hoy es un organismo completamente inútil para cumplir con lo que ordena la ley, que es combatir el lavado de activos y la financiación del terrorismo. La premisa básica cuando asume un funcionario es hacer que ese organismo funcione y logre debilitar al enemigo, a la amenaza que existe en la Argentina de modo concreto, sobre todo la amenaza narco.
-Hubo cuestionamientos contra Yacobucci por su gestión y también por gastos excesivos.
Es que cuando se nombran funcionarios que se suben al mundo políticamente correcto de GAFI, que es cumplir con estándares completamente inaplicables en Argentina, se van a reuniones internacionales todos los meses para discutir cosas que no tienen ningún tipo de importancia para nosotros, y además pretenden contratar asesores que forman parte de ese mundo de la integridad, de la transparencia que yo llamo los miembros del club de la hipocresía republicana, todo eso termina mal.
El cursus honorum es más corto que un hilo de Twitter y se presentan como si fueran la Patria. Hablan de integridad, denuncian a todo el mundo, pero son campañas completamente viciadas porque han trabajado al servicio de intereses facciosos que penetraron el Estado argentino.
Ir por esa vía produce lo que produjo: Nada, un fracaso completo del organismo.
-Lo cierto es que en la decisión de reemplazar a Yacobucci una cuestión que plantea el Gobierno es que el organismo deje de ser querellante en causas de corrupción y se enfoque en la investigación. Esto generó muchas críticas, sobre todo de sectores de la oposición. ¿Cuál es su opinión?
Mi posición la tengo escrita hace mucho tiempo, por lo tanto no es de coyuntura, y está escrita en Infobae. Acá hay otra farsa completa de ese mundillo, de los que armaron la farsa de la lucha contra la corrupción. La respuesta concreta es que la UIF argentina, de una vez por todas, tiene que dejar de querellar en toda causa penal.
-¿Por qué considera que la Unidad de Información Financiera tiene que dejar de querellar?
En el mundo hay más de 190 UIF, pero solo dos UIF que integran un sistema creado por GAFI-Egmont -entre ellas la Argentina- que querella. No existe, es un invento creado porque la política argentina se metió dentro de este organismo.
Conozco la historia bien de adentro, como abogado del Grupo Clarín desde el año 2009. El tema de la querella en cabeza de la UIF lo inventó en 2009 Cristina Fernández de Kirchner, específicamente, para ir en contra del Grupo Clarín. Lo inventó con un decreto: se le ordenó a la UIF direccionar su actividad de inteligencia financiera a los efectos de golpear al enemigo de turno, en la pelea del kirchnerismo con los medios de comunicación y sus directivos, acusándolos de lavado de dinero.
Ya ahí viciaron el funcionamiento de la UIF. Y después el gobierno de Mauricio Macri terminó haciendo lo mismo, solo que en un sentido contrario, persiguiendo a la que había sido, primero, perseguidora.
-Pero si no debería estar habilitada para querellar ¿cuál debería ser la función específica de la Unidad de Información Financiera?
La UIF tiene que dedicarse a hacer inteligencia financiera. Es técnicamente incompatible en el mundo, por eso ninguna UIF del mundo tiene esta función, es técnicamente imposible la producción de inteligencia financiera, que es análisis de reunión de información reservada, para ponerla a disposición de la Justicia y colaborar con la Justicia eventualmente y ser querellante en una causa penal donde la institución tenés posición tomada, es incompatible. Es como que la SIDE manda información a un juzgado y se presenta como querellante, no existe, vicia todo, confunde todo y desnaturaliza por completo el organismo.
Todo el falsario progresista, republicano, republicano y liberal es en realidad todo direccionamiento. El Gobierno tiene que dar el paso y no querellar más, porque es legítimo que se ocupe únicamente de producir inteligencia financiera, cuyos resultados son paupérrimos.
- A ver...
El año pasado recibieron 90.000 Reportes de Operaciones Sospechosas (ROS) de todo el sistema y produjeron menos de 900 Informes de Inteligencia Financiera (IDI). Menos de 900 y encima de muy mala calidad, lo que impide a la Justicia utilizar la información financiera para lograr los resultados de la condena y el decomiso de activos. Este un problema estructural del funcionamiento de la UIF: presión regulatoria enorme para que los bancos reporten a los clientes y contra los narcos no hay ninguna acción concreta de tipología ni de direccionamiento hacia el tema narco.
A los bancos se los obliga a reportar todo, presentan 90.000 reportes de operación sospechosa y, como en la gestión del anterior titular de la UIF, se produce lo que se produjo el año pasado. Todo, mientras se la pasaron viajando por todo el mundo, reuniéndose inútilmente.
- Uno de los planteos que surgieron en medio de esta polémica tiene que ver con la selectividad que tuvo la UIF para presentarse a querellar, porque lo hizo en el caso Hotesur, pero no en el caso Correo Argentino. ¿Qué piensa de esto?
-Es que esta es una de las cosas más graves que tiene este tema, porque la participación de la UIF en causas penales es arbitraria. ¿Dónde está el protocolo de actuación que ordena frente a todas las posibles causas de lavado de dinero de la Argentina, meterse en una y no meterse o dejar otras? Encima, con esta laxitudd, la conducción de la UIF que se fue dejó incluso de participar de procesos a narcos.
Esto pudo ocurrir porque, ante la ausencia de protocolos de actuación, la decisión es completamente arbitraria y, por tanto, política del presidente de la UIF.
Se utiliza una planta de abogados penalistas que tiene la UIF, que se paga con dinero público, que no cumple sus objetivos. Es un delirio que un órgano de inteligencia tenga un plantel de penalistas para participar en las causas penales.
- ¿Y qué tendría que hacer el Gobierno ante esta situación? ¿Ante la falta de protocolos debería presentar un proyecto de ley para reformar la UIF?
El Gobierno lo que tiene que hacer lisa y llanamente, para zanjar esta discusión, es derogar el decreto que creó Cristina Fernández de Kirchner, para perseguir al grupo Clarín específicamente y que después fue utilizado para perseguirla a ella. Se tiene que derogar y terminar esta discusión.
La acción de los jueces y fiscales tiene que respetarse. La UIF puede colaborar como un organismo del Estado, como la AFIP, como el Banco Central, pero no ser querellante. Esto es lo que se ha distorsionado. Se tiene que derogar un decreto que fue firmado por Cristina Fernández de Kirchner para perseguir.
- ¿Qué opinión tiene sobre la designación de Paul Starc en reemplazo de Yacobucci?
La decisión de designar a un fiscal federal que ha trabajado en el conurbano bonaerense en temas de seguridad, que conoce el sistema penal, que tiene calle, abre una buena chance de imprimir al organismo un direccionamiento más realista para alcanzar más efectividad en la lucha contra la delincuencia más dura. Si deja de lado los viajes inútiles y se libra de consejeros de cuarta, seguramente tendrá más tiempo para conocer mejor a los grupos criminales más duros y así fortalecer la acción de ese organismo. Apoyo la designación.
* Para www.infobae.com