Renuncia inesperada en el Senado: Emilio Olmos dejó su cargo a un mes de haber asumido y sacude al equipo de Villarruel

• Emilio Viramonte Olmos renunció a su cargo de secretario Administrativo del Senado apenas 30 días después de ser designado.
• Olmos justificó su renuncia por falta de facultades para ejercer el cargo, alegando razones de “decoro y ética republicana”.
• La renuncia afecta al equipo de la vicepresidenta Victoria Villarruel, que está en proceso de reorganización interna y formación de su gabinete.
• Olmos había sido designado con apoyo mayoritario, incluso del kirchnerismo, en un paquete de nombramientos en mayo.
• Villarruel continúa sumando figuras polémicas a su equipo, como Mario Russo y Juan Manuel Gestos Presas.
• En la misma sesión se renovaron autoridades del Senado con representantes de distintos bloques políticos.
• La salida de Olmos revela tensiones internas en el Senado y complica el fortalecimiento del oficialismo en esa cámara.

A solo 30 días de su designación como secretario Administrativo del Senado, Emilio Viramonte Olmos presentó su renuncia indeclinable, generando un inesperado revés para la vicepresidenta de la Nación y titular de la Cámara Alta, Victoria Villarruel. En una carta dirigida a la funcionaria, Olmos fundamentó su decisión en “razones de decoro y ética republicana”, aludiendo a la falta de facultades reales para ejercer el cargo.

"Motiva esta decisión que, a casi 30 días de mi designación, no cuento con las facultades necesarias para el ejercicio del cargo", expresó Olmos en su carta, en la que también señaló que no podía continuar “ostentando el cargo” sin poder cumplir con sus funciones. Su renuncia, que aún debe ser convalidada por la Cámara, se da en medio de una reorganización interna impulsada por Villarruel, quien desde hace semanas trabaja en la consolidación de su propio gabinete en el Senado.

Olmos había asumido el pasado 7 de mayo como parte de un paquete de designaciones acordado por mayoría en la Cámara Alta, con aval incluso de sectores del kirchnerismo. Su salida abre interrogantes sobre el funcionamiento interno del Senado y las tensiones emergentes dentro del armado que lidera la vicepresidenta.

En paralelo, Villarruel sigue sumando nombres a su equipo. Entre los más resonantes figuran Mario Russo, ex asesor de Javier Milei, y Juan Manuel Gestos Presas, ex militar señalado por haber ordenado la destrucción de registros de nacimientos en el Hospital Militar de Salta durante la dictadura y los años posteriores.

La última sesión en la que se oficializó la llegada de Olmos también sirvió para renovar las autoridades de la Cámara Alta. Bartolomé Abdala fue designado presidente provisional; Silvia Sapag (kirchnerismo), vicepresidente; Carolina Losada (UCR), vicepresidente primera; y Alejandra Vigo (peronismo cordobés), vicepresidente segunda.

La salida anticipada de Olmos no solo complica el armado de Villarruel, sino que también expone las tensiones políticas y burocráticas dentro del Senado, en un momento en el que el oficialismo busca consolidar poder en la Cámara más reacia a sus iniciativas.