“Ruta del Dinero K”: los condenados comienzan a presentarse ante la Justicia para cumplir sus penas de prisión

• Comenzaron a presentarse los condenados en la causa “Ruta del dinero K” para cumplir penas de prisión tras el fallo definitivo de la Corte Suprema.
• Fabián Rossi fue el primero en entregarse; lo siguieron César Fernández, Carlos Molinari y Eduardo Castro.
• Juan Alberto De Rasis está en viaje y Julio Mendoza alegó una internación médica.
• Las defensas pidieron prisión domiciliaria por edad o salud; el juez evaluará esos pedidos por separado.
• Se revisa la situación de Lázaro Báez y otros acusados para definir si el tiempo en arresto domiciliario cuenta como parte del cumplimiento de condena.
• El caso entra en su etapa final con la ejecución de las penas y el análisis de los cómputos de prisión.

Esta mañana comenzó una nueva etapa judicial en la emblemática causa por lavado de dinero conocida como la “Ruta del dinero K”, con la presentación voluntaria de varios de los condenados que deberán cumplir penas de prisión efectiva tras el reciente aval de la Corte Suprema de Justicia. El primero en llegar a los tribunales de Comodoro Py fue Fabián Rossi, exapoderado de la financiera S.G.I., condenado a 4 años y 6 meses de cárcel.

Rossi, recordado por su vinculación mediática con Iliana Calabró, se presentó en el Tribunal Oral Federal 4 una hora y media antes del horario previsto y fue trasladado luego a una dependencia de la Policía Federal. También se entregaron César Fernández, Carlos Molinari y Eduardo Castro. En tanto, Juan Alberto De Rasis estaba en viaje desde Mendoza y Julio Mendoza, ex titular de Austral Construcciones, alegó estar internado por una descompensación desde el viernes, el mismo día que se ordenó su detención.

El juez Néstor Costabel dispuso que todos los condenados se presentaran a las 10:30 horas, luego del requerimiento del fiscal federal Abel Córdoba. Son los condenados que, hasta ahora, nunca habían estado detenidos pese a que sus penas son de cumplimiento efectivo. La Corte Suprema confirmó la semana pasada las condenas por el lavado de 55 millones de dólares mediante maniobras financieras con empresas y bancos en el extranjero, en beneficio de Lázaro Báez.

Las defensas solicitaron prisiones domiciliarias por razones de salud o edad avanzada, pedidos que serán evaluados en expedientes paralelos mediante estudios médicos. Hasta que haya resolución, los acusados permanecerán en cárceles o dependencias policiales.

El caso principal sigue con atención también la situación del empresario Lázaro Báez. Condenado a 10 años de prisión, su defensa sostiene que ya cumplió la pena sumando el tiempo en prisión (2016–2019) y el arresto domiciliario posterior. Sin embargo, la Cámara Federal ha sostenido que solo deben computarse los años de cárcel efectiva.

Casos similares son los de su hijo, Martín Báez, y los de Jorge Chueco y Daniel Pérez Gadín, quienes cumplieron parte de sus condenas bajo arresto domiciliario por una causa paralela —la del campo “El Entrevero”— y ahora esperan que el tribunal decida si esos períodos son válidos para evitar volver a prisión.

Con la ejecución de las penas ya en marcha, el caso que marcó un hito en las investigaciones por corrupción y lavado durante el kirchnerismo entra en su fase final, mientras la Justicia define cómo se computarán los tiempos de detención y qué condenados deberán continuar tras las rejas.