El ataque del diputado radical Rodrigo de Loredo al intendente Daniel Passerini en la tarde del domingo que reflejó Alfil no cayó para nada bien en el entorno del titular del Palacio 6 de Julio. En las redes, De Loredo sostuvo que el alcalde capitalino “vendía humo” en la tensión con el Suoem y esas palabras tampoco fueron bien recibidas en el bloque del oficialismo en el Concejo Deliberante. Desde donde apelaron al archivo y el pasado de De Loredo como concejal de la oposición, cuando en la sesión especial del 8 de mayo del 2020 decidió ausentarse de la votación y no acompañar al por entonces intendente Martín Llaryora en la cruzada contra el sindicato liderado por Rubén Daniele.
En aquel momento, y en plena pandemia, el Ejecutivo impulsó el tratamiento en el Concejo Deliberante del recorte de la jornada y el quite de la famosa séptima hora. Todo dentro de una tensión mucha más extensa que la actual entre el llaryorismo y el Suoem; y que derivó, por ejemplo, en los ataques de afiliados al sindicato a un taxista, a un verdulero y hasta el uso de un mortero, cuyo portador fue apartado del Municipio. Todas causas que motivaron, en esa misma gestión, el tratamiento en el Concejo del proyecto de la cesantía automática.
Lo concreto es que dentro del Legislativo municipal recordaron ese archivo y sostuvieron que “cuando Llaryora decidió avanzar contra el Suoem, De Loredo se ausentó. Apagó el Zoom”. La referencia viene a colación de que, en medio de sesiones que se hacían de manera virtual a raíz del coronavirus, el bloque que el actual diputado compartía con Esteban Bría denominado en aquel momento Evolución; la bancada de Córdoba Cambia que conducía Juan Negri (donde estaban los juecistas); el de la UCR liderado por Alfredo Sapp; las concejalas del PRO y el bloque unipersonal que conducía el ahora ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, se ‘levantaron’ a medida que manifestaban su postura y antes de la votación.
Todo esto mientras las calles, aquel viernes, estaban copadas de manifestantes del Suoem en las adyacencias del ex Concejo Deliberante en la sesión especial, mientras que en el recinto virtual para ausentarse había que apagar el Zoom.
La memoria del oficialismo
En medio de una ebullición como la que vivió en las últimas semanas el bloque que conduce Martín Simonian, y donde la última reunión de la bancada terminó con fuertes cruces entre los ediles del oficialismo, el rechazo a las palabras de De Loredo no tiene grietas.
“Cuando sancionamos proyectos en contra del gremio, De Loredo no venía. Se debe lavar la boca antes de decir algo de esta gestión”, apuró un dirigente con peso dentro del arco oficialista ante la consulta de Alfil y disparó: “cuando Llaryora avanzó contra el gremio, él apagó el Zoom. Se ausentó”.
En consonancia con esto, el jefe del bloque oficialista, Martín Simonian, apuntó anoche en las redes. “Ya es costumbre en De Loredo hablar y hablar, pero los cordobeses no le creen, no confían y por eso perdió la elección. Cuando fueron gobierno con (Ramón) Mestre, tomaron créditos por 150 millones de dólares que tenemos que estar pagando todos, sin que sepamos qué hicieron con esa plata”, dijo el presidente de la bancada.
“Además de los empleados que incorporó su actual socio Luis Juez a la Municipalidad”, dijeron otros ediles y agregaron: “sin olvidar que el Gobierno nacional que él apoya es el mismo responsable de los 10 mil millones de pesos del transporte no vienen y debe aportar el Municipio”.
Otro concejal que compartió el recinto en aquel momento con el radical reconoció que “nunca, en los dos años que estuvo, De Loredo jugó una en contra del gremio”. “Al contrario, y resulta que es el mismo que critica a los sindicatos. Pero en aquel momento, cuando las calles eran un quilombo por las marchas en pandemia, De Loredo votó en contra de Llaryora y a favor del gremio hasta que se fue a Diputados en el 2021”, señaló.
En aquella ocasión, el proyecto del recorte de la jornada que significaba un ajuste del gasto municipal salió con los 16 votos del oficialismo, votó en contra la concejala de la izquierda, Laura Vilches, y se abstuvo de votar la peronista Olga Riutort.
“No vendés humo, lo fabricás”
Asimismo, otro que salió a cruzar al diputado radical fue el secretario de Participación Ciudadana, Juan Domingo Viola. En redes, el integrante del gabinete passerinista dijo: “tu palabra ya no vale nada. Apoyás a un Gobierno nacional que les quitó a los vecinos de Córdoba 7.800 millones de pesos mensuales del fondo compensador del transporte”. “Vos no sabés lo que es gestionar. La única vez que ocupaste un cargo ejecutivo fue para desmantelar la política satelital de la Argentina y le generaste al Estado un perjuicio de 38 millones de dólares. Vos no vendés humo, lo fabricás”, le dijo el funcionario.
Réplica sindical
Por su parte, y en el primero de los 15 días de la conciliación obligatoria que dictó la Secretaría de Trabajo la semana pasada, el Suoem salió a cruzar a Passerini con un fuerte comunicado. “Passerini, el cinismo como estrategia para encubrir su mala gestión”, se titula el documento que agrega en su primer párrafo una frase que replicaron varios medios ayer: “el intendente ha elegido salir de su escondite por la vía del cinismo y la omisión como estrategia para justificar una gestión que padece graves contradicciones y un notorio desprecio por los municipales”.
“Exigimos a Passerini que actúe con responsabilidad, que hable con datos ciertos y que deje de esconderse detrás de discursos vacíos. Córdoba necesita gobernantes que pongan a las personas por encima de las excusas, que privilegien la verdad y la transparencia sobre los intereses mezquinos”, dice en el tramo final de un extenso comunicado. El cual, además y al momento de difundirlo, apelaron desde el gremio a la comparación con otro exintendente: Germán Kammerath.
Con este clima, arrancaron los 15 días de la conciliación obligatoria entre el Municipio y el Suoem.
CON INFORMACION DE DIARIO ALFIL, SOBRE UNA NOTA DE SILVA GABRIEL.