Dólar y elecciones: se vienen tres semanas clave

ECONOMÍA Agencia de Noticias del Interior
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Mientras el dólar se frota las manos preparándose y ya precalienta para el último tramo de la carrera 22-O, los candidatos siguen haciendo de las suyas. Por lo pronto, en las mesas de operaciones y en los búnkeres de las gestoras ya decantan las emociones y expectativas, y tienen un panorama más o menos claro: esto es un desastre. Ningún candidato logra emocionar ni alentar un atisbo de esperanza. Así lo ven también en el exterior.

El intercambio entre inversores locales y sus pares extranjeros da cuenta de que, a diferencia por ejemplo del 2015, nadie cree que a priori ni Javier Milei ni Patricia Bullrich y menos Sergio Massa puedan garantizar dar vuelta la economía y barajar y dar de nuevo dando lugar a un nuevo esquema económico que saque al país de la encrucijada del estancamiento secular. No es que Mauricio Macri era visto como “el iluminado” o como “el estadista profético”, nada más lejos de ello, sino que llegó a despertar “sueños” de que se podía revertir la decadencia y encarar el resurgimiento de la economía. Pero fue todo lo contrario y hoy los inversores de afuera no apuestan ni un centavo.

Obvio que los especuladores siempre están atentos a jugar alguna ficha, sobre todo, por los retornos que prometen los activos argentinos, pero nada más, nadie espera ni una garúa de inversiones y menos desembarcos productivos, más allá de los ya asociados con el sector energético y algún que otro leading case como el litio. De todo esto se habla en las mesas y sobre todo se plantea el interrogante de si ¿ya pasó la ola Milei? Al respecto, los sondeos, más allá de las reservas del caso, muestran al unísono que tras las PASO el líder libertario ganó mucho terreno.

Hoy Milei parece estar en cuarteles de invierno, se corrió del escenario, por consejo de sus adláteres. Milei tenía un nivel de imagen positiva del orden del 35% que oscilaba en función de sus bravuconas declaraciones. Lo que ahora todo parece indicar es que tras las PASO Milei tuvo su mejor performance llegando a un nivel de imagen neta neutra (42% positiva y 44% negativa) y ahora volvió lentamente a los niveles previos. Es como que la ola ya pasó, tocó su pico y empezó a bajar su imagen, dicen los expertos. El eje de la campaña de Milei de la dolarización y los vouchers en términos de efecto parece haberse agotado.

¿Ahora entonces quién fija la agenda? Y bueno, Massa con su andanada de medidas de expansión del gasto ocupó el centro del escenario, pero nada más. En tal sentido, la consultora EcoGo de la economista Marina Dal Poggetto calcula que el costo fiscal del llamado Plan Platita es de aproximadamente 1,3% del PBI. Chau meta FMI. En términos de proyección del déficit, el impacto adicional para octubre sería de $800.000 millones, otros $700.000 millones para noviembre y unos $460.000 millones para diciembre. Pobre Miguel Pesce, hará horas extras con la maquinita.

Por su parte, Bullrich sigue con su derrotero de desaciertos, ayudando a la campaña oficialista y libertaria. Lo que sí ven los expertos es que su imagen positiva semanas antes de las PASO ya empezaba a caer y luego se aceleró, en forma coincidente con el fenómeno de no agresión de parte de Milei. Ahora pareciera que empezó a recuperar algo. Frente a este panorama tanto los consultores como los operadores cuentan los días hábiles que le quedan por delante al BCRA hasta el 22 y de ahí al balotaje, si lo hay, y la transición hasta el 10 de diciembre porque ya sin compra de reservas cómo hará el BCRA para controlar la brecha, lo que no logró incluso comprando con el último dólar agro. 

 

 

Con información de www.ambito.com

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