Tras algunas semanas de tensión por mensajes -y objetivos- cruzados, el jefe de uno de los bloques radicales en Diputados, Rodrigo de Loredo, y el senador Luis Juez, achicaron diferencias en los últimos días. No se sabe cuánto en kilómetros, según palabras de ambos; pero sí en los gestos, como el que se vio el viernes pasado en el encuentro de La Generación Argentina, la guardia joven que dentro del extinto Juntos por el Cambio impulsa el expresidente Mauricio Macri.
Los parlamentarios cordobeses se reencontraron, según confió un integrante del entorno de uno de ellos “con muchos ‘piquitos’”, pero se desconoce cómo siguió la reconciliación. En el escenario, y al lado del gobernador de Chubut, Ignacio Torres; la vicegobernadora de Santa Fe, Gisela Scaglia; y la diputada María Eugenia Vidal, hubo guiños entre ambos, autocrítica por lo que sucedió el año pasado, sobre todo cuando Juez tildó -con gracia- que “Rodrigo es calesitero, es peor que (Juan Román) Riquelme”. Aunque rápidamente aclaró que había plena sintonía y que no se van a pelear.
Algo en lo que también coincidió De Loredo a su turno.
Ambos decidieron apuntar sus dardos en contra del peronismo cordobés durante la catarsis de la oposición dialoguista a Javier Milei y pensar en lo que viene. En esa carrera, Juez volvió a hablar de los “ocho kilómetros”, pero destacó que lo hizo porque antes De Loredo, en otra entrevista, había señalado que para el 2027 “era una carrera de resistencia, una maratón”.
En el horizonte, cierto es que De Loredo tiene más premura que Juez por ver cómo se definen las cosas. Sobre todo, porque como adelantó Alfil hace varias semanas, el senador no tiene interés en jugar en el 2025, lo que señaló acerca del exgobernador Juan Schiaretti lo hizo para inquietar al búnker peronista y sabe que su aliado es el que debe definir qué hacer.
Por eso, para De Loredo la situación es distinta. Si se eliminan las Paso -algo en lo que el peronismo cordobesista está trabajando silenciosamente-, será uno de los más perjudicados. Por esto, un diputado del schiarettismo buscó argumentos para rechazar que “la gente vaya a votar hasta cuatro veces en un año”, aunque reconoció que “con las Primarias no se pueden resolver las internas de los partidos que no las tienen”.
En otras palabras, el cordobesismo se va a mover al compás de Milei para derogar las Paso y evitar un año largo desde lo electoral. Además de complicar la cancha de un rival directo como De Loredo.
Asimismo, y con el objetivo de subir la tensión con el peronismo, el diputado radical salió a embestir ayer en redes en contra del intendente Daniel Passerini. Citando una entrevista del titular del Palacio 6 de Julio e Voz y Voto, De Loredo dijo que “Passerini ‘vende humo’”.
Lo criticó por no precisar qué tasas municipales se van a bajar, por reconocer “las fortunas que ganan los empleados municipales”, por ponderar el sistema de transporte, “mentir con la Sube” y la planta de funcionarios de la Municipalidad.
CON INFORMACION DE DIARIO ALFIL, SOBRE UNA NOTA DE SILVA GABRIEL.