El tiempo - Tutiempo.net

Marcos Carasso socializa los costos de la transición en la UCR de Córdoba y cede el poder

POLÍTICAAgencia 24 NoticiasAgencia 24 Noticias
carasso-retratojpg

"Dejar fluir", tal es el camino que eligió Marcos Carasso, presidente de la UCR de Córdoba, en los tiempos de turbulencia interna que siguieron a la triple derrota de 2023. La elección en Río Cuarto de este domingo entusiasma y puede abrir un nuevo capítulo para el centenario partido, con cuerdas que se tensan, también, desde la Defensoría del Pueblo.

on demasiados los factores que inciden en el presente partidario como la irrupción de Javier Milei y el gris en el que algunos dirigentes boinablanca, como Rodrigo de Loredo, se mueven. Sus espadas en la Legislatura comienzan a amigarse con la idea de unirse en un ambicioso esquema, llamado en el plano de la fantasía Juntos por la Libertad. Desde ahí podrían jugarse las candidaturas al Congreso el año que viene y sumar chances.

En 2025, además de concluir el mandato de De Loredo, también vencen las bancas de Gabriela Brouwer de Koning y Soledad Carrizo. ¿Podrá el radicalismo impulsar alguna alquimia para mantener esos lugares? Pregunta que aún hoy no tiene respuesta.


En los pasillos de la Casa Radical circula una verdad a voces: “Carasso se puso en punto muerto y socializa los costos de su transición”. Contra las cuerdas, al presidente del partido no le quedó opción que llevar adelante la Cumbre de Giardino y la conformación del Foro de Concejales y Tribunos de Cuenta.
Al menos se va con esos “laureles”.
Los radicales de Córdoba caminan en terreno minado
El radicalismo cordobés juega al vintage y noventoso Buscaminas. Mientras sus autoridades orgánicas tachan los días del almanaque que los lleve a la renovación de septiembre, se hace muy difícil detectar los explosivos. Sin estrategia común y con una multiplicidad de jugadores en la cancha, cualquier clic puede generar una explosión.

En la vereda del frente, el peronismo sabe muy bien cómo dinamitar el terreno de la oposición y la ambulancia de Martín Llaryora sigue a pura marcha a través de su vicegobernadora, la radical Myrian Prunotto.

En tanto, a nivel nacional, otro factor de quiebre es la multiplicidad de terminales, empezando por Milei y siguiendo por el senador Martín Lousteau, a cargo de la presidencia del Comité Nacional. La semana pasada el líder de Evolución presentó su propio dictamen en el Senado sobre la Ley Bases; ahora, el diputado cordobés deberá defender el proyecto original de la cámara baja.

En esa ensalada, el concejal Sergio Piguillén, socio minoritario del deloredismo, elige el camino del silencio para no pararse de manos al titular del bloque radical en Diputados. En tanto, el legislador alfonsinista Dante Rossi y el titular del núcleo Confluencia, Ramón Mestre, tironean de la soga y se desmarcan de Milei.

Desde otra entente, la diputada nacional Soledad Carrizo y el exlegislador Marcelo Cossar le dan cierto changüí al presidente Milei. Al mismo tiempo, Carasso parece estar recorriendo de la mano del exdiputado Mario Negri el mismo camino: “Laissez faire, laissez passer” o “dejen hacer, dejen pasar”, sin intervención de la autoridad partidaria.

Mientras el interbloque conducido por la radical Alejandra Ferrero explora la confianza y acepta que sus integrantes puedan votar distinto en el recinto, Carasso no logra encontrar un factor de unidad partidario.

Al mismo tiempo, la tropa legislativa y los intendentes radicales suplen la movilización partidaria y acumulan fotos por el interior de la provincia.

El desafío de Marcos Ferrer y la elección en Río Cuarto
El intendente de Río Tercero, Marcos Ferrer, conserva el pergamino del municipio más grande conducido por la UCR. Si los números se confirman, la elección de Río Cuarto le puede dar aire fresco al radicalismo mediterráneo, con Gonzalo Parodi como un nuevo actor.

También, le quitará a Ferrer una chapa que exhibe con contundencia y que lo pone con chances de presidir el Comité Provincia.

Si bien el dirigente de Río Tercero dialoga con todos los sectores internos del radicalismo, no hay certezas concretas acerca de cómo jugarán el exintendente Mestre, la diputada Carrizo y Prunotto, que acelera su raid de reuniones en el interior y la Capital.

La otra gran batalla de la UCR de Córdoba
La interna del radicalismo también se cuela en la Defensoría del Pueblo. Son públicas las ambiciones que tienen Carasso y el exnegrista Julio Ochoa. Ambos van por el sueño de ocupar la tan ansiada silla que en el mes próximo dejará el radical Mario Decara y que cuenta para este año con un presupuesto que supera los 3.000 millones de pesos. Sucede que las ambiciones del titular del radicalismo cordobés son indirectamente proporcionales con sus responsabilidades partidarias.

Como contó Letra P, desde otro frente, el legislador Gregorio Hernández Maqueda indirectamente se mete en la interna boinablanca. “No se puede nombrar un nuevo defensor sin una revisión previa respecto a cómo funcionó la institución en los últimos 15 años. Hay que despartidizarla y elevar su calidad para que le sirva a la gente y no a la casta”, le dijo a este portal el legislador filolibertario.

Otro experimentado jugador para la Defensoría que va a calar en la UCR es el ex legislador de Encuentro Vecinal Córdoba, Aurelio García Elorrio, lanzado a ese convite. Probablemente, Alejandra Ferrero, jefa del interbloque de JxC, contaba en el poroteo con el aval del vacinalista Rodrigo Agrelo, que ahora tiene su propio candidato a defensor.

Esta batalla se libra en la Legislatura y el resultado debe, necesariamente, salir de un acuerdo con el Partido Cordobés. Finalmente, cada jugada errada del Buscaminas radical puede detonar una bomba que eche por el aire tantos objetivos partidarios como núcleos internos.

CON INFORMACION DE LETRA P.

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto