


En el primer piso del Senado prefieren guardar silencio, pero Victoria Villarruel decidió convocar a la sesión del próximo 3 de abril después de confirmar un dato central, que la dejó mejor parada en la mala relación que tiene con el presidente Javier Milei. La señal provino del otro lado de la ultrapolarización que divide al recinto que ella conduce. La vicepresidenta decidió convocar el debate sobre los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla cuando se enteró que el bloque del panperonismo sufrió un crujido interno, con el nacimiento del bloque Convicción Federal, integrado por cuatro miembros del conglomerado que hasta ahora sólo conducían José Mayans y Juliana Di Tullio.
El nuevo espacio se presentó “dentro del interbloque”, es decir, como parte de las 34 voluntades. Pero en el Senado solo pesan los bloques y ahora el peronismo pasó de tener dos bancadas, a contar con tres. Para Villarruel fue un atenuante alentador después de un diciembre negro, por la expulsión de un aliado clave del Gobierno, como el exsenador Edgardo Kuider, echado de la cámara después de su detención en Paraguay con dinero que no pudo declarar. Lleva tres meses preso. Su destitución le permitió al peronismo recuperar una banca. Lo suplantó la entrerriana Estefanía Cora, de La Cámpora, y le aportó el poroto número 34. Con la irrupción del nuevo bloque, conducido por el puntano Fernando Salino y la jujeña Carolina Moisés, se cristalizó una nueva división en una bancada liderada, hasta ahora, por el kirchnerismo. En su discurso público el nuevo espacio sostiene que nació para marcar una agenda federal, pero en privado se trata del desacuerdo de esos cuatro senadores con la conducción de Mayans y Di Tullio. Sin embargo, sobrevuela una sospecha aún mayor. Distintas voces del peronismo creen que se trata de los primeros cuatro votos peronistas que tendrá el juez Ariel Lijo cuando llegue el momento de votar su pliego. La idea de UxP es hacer caer las dos nominaciones para rechazar que Milei los designó por decreto y en comisión por un año. García-Mansilla tiene dictamen de la Comisión de Acuerdos y quieren rechazarlo porque está en la Corte por decreto. Lijo no quiere renunciar al juzgado que ocupa y la Corte no le anuló una licencia extraordinaria. “La oposición que tomaba carrera para voltear a los dos candidatos ahora no tendría los números para voltearlo ni para ratificarlo”, pronostican en el oficialismo. En algunos bloques aliados siguen apostando que el Ejecutivo los baje, pero en la Rosada niegan esa posibilidad. ¿Villarruel buscó esos votos peronistas? La respuesta sigue sobrevolando y se conocerá el jueves 3 de abril.
* Para www.perfil.com





Córdoba se prepara para recibir turistas con la semifinal de Copa Argentina: las reservas llegan al 90%





Natalia De la Sota se presenta como “la alternativa anti Milei” en Córdoba y comienza a "preocupar" a muchos


Milei cerrará la campaña en Rosario con un mensaje de esperanza y apuesta por un “futuro posible”

Adorni confirmó que habrá cambios en el Gabinete tras las elecciones y defendió la continuidad de Werthein

Presupuesto en pausa: el oficialismo busca consenso pero la oposición exige a Caputo en el Congreso

El voto joven, protagonista de las legislativas: más de un millón de nuevos electores debutan con la Boleta Única

Fargosi: “Las elecciones definirán si la Argentina consolida el rumbo o vuelve atrás”

Santilli redobla la apuesta libertaria en Buenos Aires y se distancia del escándalo Villaverde

Pichetto cargó contra el Gobierno y los empresarios: “Les encanta bailar la música del verdugo”





"Manes se quiso quedar con mi herencia": 27 noches, el éxito de Netflix que es lapidario con el diputado Radical



