El fin de año de Andrés Fassi: cumbre secreta con Javier Milei y respaldo del Círculo Rojo de Córdoba

El Club Atlético Talleres agasajó a sus 77 auspiciantes con un ágape y premios en el predio de entrenamiento, ubicado a la vera de la avenida Circunvalación de Córdoba. Cuando se apagaron las luces, el mensaje que quedó flotando era político. Fue un año que excedió lo deportivo para Andrés Fassi y que lo convirtió en aliado de Javier Milei.

“Fue un año difícil”, repetían las autoridades del Matador buscando la dosis de dopamina en la extensa mesa de fiambres, quesos, bruschettas finamente decoradas y una amplia carta de aperitivos. Su batalla cultural contra el manejo del fútbol hizo que Mauricio Macri, primero, y Javier Milei, le pusieran el ojo.
 
Con una presentación en el Tribunal Internacional de Disciplina Deportiva en espera, Fassi transita una batalla feroz contra el jefe de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), Claudio Chiqui Tapia. Espera rebatir la decisión del organismo que le prohíbe ejercer la representación del club cordobés como amonestación por el confuso episodio de violencia que protagonizó con el árbitro Andrés Merlos en Mendoza.
Todo pareciera indicar que la política que toma y deja según conveniencia eligió tomar distancia de los duelistas. Tapia tomó de rehén a la Selección Argentina y el gobierno libertario llegó hasta ahí cuando constató que una intervención política a la AFA podría terminar con la Scaloneta separada de torneos de renombre. Como contó Gabriela Pepe en este medio, fue crucial el apoyo de la FIFA y la Conmebol al sector que se opone a las Sociedades Anónimas Deportivas.
La cumbre privada entre Javier Milei y Andrés Fassi
Sin embargo, el bajo perfil es la estrategia elegida. Fassi llegó temprano este lunes a la Casa Rosada. Mantuvo un encuentro de más de una hora con Milei. El contenido de la reunión se mantuvo en reserva. El resumen al que puso acceder Letra P fue directo: “El Presidente ratificó su apoyo a Fassi”.
Fassi seguirá insistiendo. Por eso el Sponsor Day que organizó el club fue político: el plan institucional que apunta al crecimiento patrimonial como base de lo deportivo no se toca. Marcó los objetivos de trabajo para 2025 con foco en la innovación, la dedicación profesional y la creación de valor de un modo sustentable.

El auditorio compuesto por representantes de las 77 marcas cordobesas e internacionales que bancan los trapos fue el remate de ese mensaje. “Las empresas que acompañan el proyecto de Talleres se suman en la convicción de que el fútbol tiene potencial de transformación comunitaria”, reforzaba el sentido en el entorno de Fassi.

Entre las sillas coquetamente vestidas se encontraban envíados de Holcim Argentina y Le Coq Sportif, además de ceos de importantes firmas locales.

Si Fassi queda peleando solo, el tiempo lo dirá. Tapia tomó sus precauciones con el traslado de la sede de la AFA a la jurisdicción que gobierna el peronista Axel Kicillofy selló el respaldo de los organismos que regulan el deporte.

En el plano local, el presidente de la AFA logró el apoyo del mandamás de Instituto, Juan Manuel Cavagliatto, un convencido del modelo con sociedades civiles sin fines de lucro. También, del titular de Belgrano, Luis Fabián Artime, quizás por convicción, aunque más por debilidad política interna.

El centrismo de la política de Córdoba
El gobernador de Córdoba juega en las dos canchas: en la social y en la económica productiva. Mientras Fassi agradecía el apoyo privado a Talleres, Martín Llaryora participaba de la celebración por los 100 años de la Federación de Básquetbol de Córdoba, anunciaba 50 nuevos polideportivos en toda la provincia y destacaba el rol social y cultural de los clubes. Paralelamente, los comunicados oficiales celebraran un impacto económico de $6.000 millones por el partido entre Boca y Vélez que se organizó en el Estadio Mario Alberto Kempes.

 
Fassi agitó la posibilidad de una candidatura para 2025 que siempre negaba en privado. Sabe que la expectativa en política es fundamental. El Presidente se mantiene cerca de Fassi. Todo parecería indicar que comparte la lucha federal que Talleres encara desde los ’70.

Cierto es que Milei elige nuevos focos de atención para mantener esa expectativa. Las SAD, ficha limpia, la casta, los gremios, Aerolíneas Argentinas, Victoria Villarruel… los rafagazos continúan.

Quizás Fassi toma sus precauciones y ante la mirada de los auspiciantes ratificó que “todo es por Talleres”, pero su nombre no sale de la pelotera de versiones para la ronda electiva del año que viene.

¿Habló con Milei de una potencial candidatura? “Hablan de todo”, soplan.

**Por Yanina PASSERO para Letra P