El gobernador Martín Llaryora baja con todo a Punilla para inaugurar dos obras de cloacas máximas en la cuenca sur y media del lago San Roque, cuyo saneamiento es motivo (o excusa) de la alta tensión entre el oficialismo provincial y el intendente de Villa Carlos Paz, Esteban Avilés. El jefe comunal fue aliado del oficialismo provincial durante la etapa de Juan Schiaretti pero se desprendió del acuerdo ya durante la campaña electoral de Llaryora, molesto por el diálogo del sanfrancisqueño con el caserismo. El hoy gobernador puso la lápida al vínculo con la designación del radical Emilio Iosa, adversario local de Avilés y excandidato a intendente, como director de la Cuenca del San Roque, dentro del ministerio de Ambiente que conduce Victoria Flores.
Extraoficialmente, en el Panal pusieron signos de interrogación sobre la presencia de Avilés en los actos donde estarán las autoridades de Infraestructura y de Ambiente de la Provincia, y señalan como antecedente que el ex titular de Cordoba Turismo no asistió el miércoles a la entrega de 100 millones de pesos en créditos blandos para familias de Villa Carlos Paz, una actividad que encabezó el ministro de Gobierno, Manuel Calvo, junto a la secretaria de Economía Social, Rosalía Cáceres, y la vicepresidenta del Ersep, Mariana Caserio, que fue como dirigente local de ese team.
A la entrega de esos préstamos y la inauguración de la cloaca Sur en la Estación de Bombeo San Antonio y la Planta Depuradora de la Cuenca Media se suma la apertura del Palacio de Justicia de Carlos Paz, ubicado en pleno centro de la ciudad. Este evento tendrá la presencia del presidente del Tribunal Superior de Justicia, Luis Angulo, y de otros vocales del alto cuerpo, y en la villa estiman que Avilés sí estará. Nobleza obliga: hace unos días, el TSJ resolvió que la ya diezmada Cooperativa Integral de Villa Carlos Paz, muy enfrentada al intendente, debe entregar al municipio la planta de tratamiento de cloacas y el servicio cloacal al municipio local, lo cual fue un triunfo judicial y político para el jefe municipal, en cuyo entorno aseguran que la entidad colaboró con la campaña de Iosa. Por lo demás, la obra era muy esperada por la comunidad judicial y abogadil de la ciudad, una de las más importantes a nivel turístico del país y con problemáticas judiciales y de seguridad típicas de las zonas de turismo. Alfil no obtuvo respuesta de los funcionarios de la Municipalidad carlospacense a los que consultó.
Para el Panal, lo que se construyó en la Cuenca del San Roque es lo máximo que puede hacer el estado provincial para sanear el Lago, y lo que resta para evitar otra crisis contaminación y cianobacterias son las obras domiciliarias de conexión de cloacas que dependen de los municipios de la cuenca, entre los cuales Carlos Paz es el mayor en habitantes y en actividad. En ese tironeo entre obras provinciales y obras municipales para descontaminar el espejo de agua departió la relación entre el llaryorismo y el avilecismo en los últimos tiempos. Uno de los últimos capítulos fue por el proyecto Barro por Arena, que impulsó Iosa y que consiste en la extracción de arena o áridos del río San Antonio para evitar la acumulación de sedimentos, y su redistribución en playas degradadas. La propuesta fue mal vista por el avilecismo. En vísperas de la actividad de Llaryora en Punilla y de la presentación de las obras de cloacas máximas con toda su gente, el proyecto fue motivo de rechazo del oficialismo en el Concejo Deliberante de la villa.
La situación viene tensa y con pronóstico de tormenta porque es una zona de votos codiciados. Avilés se muestra cerca del presidente Javier Milei, a quien fue a ver cuando estuvo en Córdoba por el aniversario de la Fundación Mediterránea. Se dice que quiere ser su hombre en Córdoba. El gobernador tiene interés en hacer pie en Punilla, departamento que votó a Luis Juez el año pasado en las elecciones para gobernador, donde el libertario es muy fuerte, como lo fue Mauricio Macri, y donde Avilés mostró sostener su potencial electoral todos estos años. En ese marco, oficialismo provincial bajo bandera llaryorista trató de limar las asperezas de la vieja interna peronista entre los Caserio y el schiarettismo, aunque en esos zurcidos se desacomodan las cosas con el sector de Alejandra Vigo, que tiene trabajo en la zona. Su apuesta es reconstruir política y territorialmente desde la Comunidad Regional que encabeza el peronista Fabricio Díaz, que integró el espacio de Carlos Caserio y responde al Panal, con (casi) todos adentro. Mientras, pone sus fichas para la Intendencia en Iosa, aunque Mariana Caserio seguramente reclamará su chance. No hace mucho, el caserismo mostró un mapa de afiliaciones PJ en la provincia, que indica que el departamento Punilla concentra más cantidad nominal de afiliados que otros con más habitantes como Colón y Río Cuarto. ¿Argumento para ir con un candidato peronista para la villa?
CON INFORMACION DE DIARIO ALFIL, SOBRE UNA NOTA DE BETTINA MARENGO.