El tiempo - Tutiempo.net

El mercado sigue de cerca la inflación de agosto y se preocupa por el atraso del dólar

ECONOMÍA Marcos Phillip*
582196

Las últimas cifras de inflación en Argentina han generado un leve optimismo entre los economistas y analistas de mercado. Según los datos publicados por el INDEC, el índice de precios al consumidor (IPC) de julio registró una baja respecto a meses anteriores, lo que marca una tendencia a la moderación.

Sin embargo, los expertos advierten que esta desaceleración podría ser temporal y que diversos factores podrían obstaculizar un descenso más pronunciado de la inflación en el mediano plazo. Entre estos factores se encuentran la rigidez de ciertos precios, como los servicios, y la persistencia de políticas monetarias expansivas.

Si bien las últimas cifras son alentadoras, los analistas advierten que el camino hacia la estabilidad de precios aún es largo y complejo. La persistencia de la inflación en niveles elevados durante varios años ha generado una indexación de la economía, lo que dificulta la tarea de reducirla.

Además, la proximidad de las elecciones presidenciales de 2025 y la incertidumbre sobre el futuro de la política económica generan un clima de volatilidad que podría afectar las expectativas de inflación.

En conclusión, la desaceleración de la inflación en Argentina es una noticia positiva, pero es necesario mantener la vigilancia y adoptar medidas políticas adecuadas para consolidar esta tendencia y lograr una estabilidad de precios a largo plazo.

La inflación de julio

De acuerdo con la sociedad de bolsa GMA Capital, hace algunas semanas, Caputo había adelantado que la variación del IPC de julio sería la más baja del año. Y, a la luz de lo que esta semana el INDEC publicó, la "promesa" fue cumplida.

Además, resaltaron que la inflación de julio fue 4% y hubo razones para celebrar: la cifra no solo retomó el camino de la moderación, que se había interrumpido en junio, sino que fue la más baja desde enero de 2022. En tanto, la nominalidad acumuló 87% en 7 meses, mientras que la medición interanual fue de 263,4%.

"La inflación núcleo, que excluye Regulados y Estacionales, registró 3,8%, acelerando la cifra frente al 3,7% del mes pasado. ¿Estamos llegando a un piso inercial? observamos que los precios de los bienes parecen converger más rápidamente hacia la marcha del dólar oficial. Pero los servicios cuentan una historia diferente, más relacionada con lo que en la literatura se conoce como precios "pegajosos". Este concepto se refiere a la resistencia de los precios a ajustarse rápidamente a los cambios en la oferta y la demanda", señalaron.

Para los expertos de GMA, esta rigidez en los precios puede ocurrir por varias razones. Entre las más relevantes encontraron contratos e indexación, "costos de menú", expectativas y comportamiento de los consumidores, y regulaciones gubernamentales.

"Además de estos aspectos ampliamente estudiados en economía, podríamos esperar una nueva fuente de rigidez futura: nuevos ajustes sobre aquellas partidas que aún se encuentran atrasadas con respecto a la inflación general. En agosto veremos cómo impactan las subas en tarifas al transporte sumado a los aumentos en los servicios de luz y gas en promedio de un 4%", indicaron.

Baja o no baja

De acuerdo con Consultatio, la desinflación tiene algo más para dar siempre que se mantenga la credibilidad del ancla fiscal y que no surjan disrupciones por el lado cambiario. Con una determinación estoica en el equilibrio de las cuentas públicas, el frente cambiario es el que consideramos el mayor riesgo.

Con la actual política de intervención en los dólares financieros, sus analistas estiman que es mucho más probable que las tensiones se expresen como una pérdida mayor de reservas que por una ampliación de la brecha, asique es a ello a lo que debemos estar atentos. Los meses más desafiantes son septiembre, octubre y noviembre, donde se juntan los pagos de importaciones, la baja del impuesto PAIS, una actividad económica algo más pujante, un tipo de cambio más apreciado y el piso estacional de las exportaciones.

"Por el lado monetario, con una política que aún no opera restrictivamente (la base monetaria tradicional creció más de 60% desde que se decidió fijar el target de base monetaria amplia) y con recuperación de la actividad económica, reducir la inflación por debajo del 2% en el mediano plazo, como espera el gobierno, luce sumamente desafiante", apuntaron.

Para el bróker, el mercado también cree que hay margen para que la desinflación continúe, y los resultados de la licitación del Tesoro de este miércoles lo reflejan bien. En concreto, el Ministerio de Economía recibió ofertas por $4.5 billones y licitó $1.6 billones que adjudicó en su totalidad en la Lecap con vencimiento en jun-25 a una tasa mínima de 3.95% TEM, declarando desierta la licitación del resto del menú.

La intención del gobierno fue clara, pero lo destacable es que el mercado dio el visto bueno en dos sentidos: i) convalidó plazos más largos, y ii) aceptó una tasa mínima que se encuentra por debajo del 4.0% TEM. Dicho de otra manera, se mostró confiado en que el plan de desinflación del equipo económico para los próximos meses será exitoso.

"Según nuestro propio escenario base, tendemos a estar un poco más cerca de lo que espera el mercado, aunque corfuderbación que está algo por encima, en especial para los meses de agostopno diciembre, aunque en este último caso nuestro escenario de unificación cambiaria nos altera la comparación. Por esto, todavía preferimos en general la curva CER", explicaron.

Cómo sigue la dinámica de precios

Para GMA, los pronósticos de los economistas de la city porteña señalan que por primera vez desde el comienzo de la nueva administración, la inflación mensual relevada por el BCRA fue menor que la efectiva. La mediana del último REM era igual a 3,9% para julio, 10 puntos básicos por debajo de lo que el INDEC calculó. Y para lo que resta del año, consultores esperan un sendero estable entre 3,7% y 4%. Es decir, de acuerdo con las estimaciones, el proceso de desinflación encontraría resistencias en el futuro próximo.

Por su parte, explicaron que los inversores continúan siendo más optimistas sobre los próximos meses. Es cierto que, luego del dato de inflación y de una demanda de instrumentos insatisfecha en la licitación, la curva CER fue buscada y mostró cierta suba en precios.

"¿Esto significa que los inversores esperan que la desinflación siga su marcha en los próximos meses y que el pass through sea limitado frente a una unificación cambiaria? ¿O simplemente no esperan que el desmontaje del cepo suceda antes de finalizar el primer semestre del 2025?", se preguntaron.

Para los expertos de GMA, una rápida mirada a los futuros de dólar indica que el mercado no espera grandes grandes alteraciones dentro de los próximos 12 meses. Así, ya pareciera que no habría un salto de magnitud en el dólar oficial en el corto plazo, una lectura que le daría fuerza a la hipótesis de levantamiento del cepo después de las elecciones de 2025.

"La desinflación es la prioridad. Incluso al costo de perpetuar restricciones cambiarias que la historia se encargó de mostrar que no sirven para acumular dólares sostenidamente ni para fomentar la inversión, driver clave del crecimiento y de la productividad", concluyeron.

 

 

* Para www.iprofesional.com

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto