La Iglesia eligió como máxima autoridad a un obispo crítico del Gobierno

Al recibir el respaldo de sus colegas, el arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Daniel Colombo, quedó elegido como presidente del Episcopado para los próximos tres años. Tomará el lugar de jefe de la Iglesia que ahora ocupa el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, cuyo mandato concluye en la asamblea plenaria que se desarrolla en Pilar hasta el viernes.

Con 63 años y experiencias previas en las diócesis de Orán y La Rioja, Colombo se destacó como un pastor con una profunda sensibilidad social. Su formación se inició con el recordado obispo Jorge Novak en Quilmes, y en su paso por La Rioja impulsó la beatificación de monseñor Enrique Angelelli y los mártires riojanos, asesinados durante la dictadura militar en 1976. Entre sus atributos se le reconoce una notable capacidad para promover el diálogo y liderar pastoralmente.

Cambios en el Episcopado: un contexto desafiante para la nueva conducción

La nueva conducción de la Iglesia en Argentina deberá enfrentar un complejo escenario social, marcado por el crecimiento de la pobreza que ya afecta a más de 25 millones de personas, y por una fragmentación política con fuertes tensiones entre el gobierno de Javier Milei y la oposición. En septiembre, cuando se debatía el veto a un aumento a los jubilados, Colombo expresó su inquietud ante “la sobreactuación de la crueldad en algunos anuncios” del gobierno nacional.

Es habitual que las nuevas autoridades del Episcopado soliciten una audiencia con el Presidente para transmitir el saludo navideño de la Iglesia. Aunque aún no se confirmó este encuentro, Colombo, reconocido por su inclinación al diálogo, se mostró crítico del estilo agresivo y confrontativo de la política actual en el país.

El nuevo titular del Episcopado acompañaba a Ojea como vicepresidente primero desde 2021 y, en el período previo, había sido vicepresidente segundo. Este voto de los obispos parece apuntar a una continuidad en la conducción,

Los otros tres cargos de la comisión ejecutiva también se renovarán. Como vicepresidente primero fue elegido el arzobispo de Córdoba, cardenal Ángel Sixto Rossi, un jesuita con una voz que suele acercarse a los sectores más desfavorecidos. Monseñor César Daniel Fernández, obispo de Jujuy y ex rector del seminario metropolitano de Villa Devoto, será el vicepresidente segundo, y monseñor Raúl Pizarro, obispo auxiliar de San Isidro, el secretario general.

La asamblea episcopal se extenderá toda la semana, y en los días siguientes los obispos elegirán, también por voto directo, a los presidentes de las comisiones, incluida la de Pastoral Social, y al titular de Cáritas, en un contexto de creciente preocupación por los elevados niveles de pobreza. La reunión, última del año, concluirá el viernes con una misa en la Basílica de Luján. En diciembre, la nueva comisión ejecutiva encabezará la reunión de la comisión permanente, integrada por unos 20 obispos.

Marcelo Colombo: discípulo de Novak y trayectoria en el clero

Nacido en Buenos Aires en 1961, Colombo fue ordenado sacerdote en 1988 en la catedral de la Inmaculada Concepción de Quilmes por el obispo Jorge Novak, un destacado referente de la Iglesia en la defensa de los derechos humanos durante la dictadura militar. Colombo se graduó de abogado en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y completó sus estudios en filosofía y teología en la Universidad Católica Argentina (UCA) y en el Centro de Estudios Filosóficos y Teológicos de Quilmes.

En 2009 asumió como obispo de Orán, en Salta, donde enfrentó importantes desafíos pastorales y sociales, y en 2013 fue designado obispo de La Rioja. En 2018, la Iglesia local lo promovió a arzobispo de Mendoza, en un momento en que se presentaban denuncias por abusos en la Iglesia.

En octubre pasado, Colombo participó del Sínodo convocado por el papa Francisco en el Vaticano, donde se debatieron los desafíos que enfrenta la Iglesia en el mundo actual.

Lo secundará en el Episcopado el cardenal Rossi, quien fue alumno del entonces padre Jorge Bergoglio en el seminario jesuita. En 1992, Rossi fundó en Villa de Mayo la Fundación Manos Abiertas, una obra apostólica vinculada con la Compañía de Jesús que congrega voluntarios para distribuir alimentos y ropa en comunidades vulnerables.

Considerado un obispo cercano a la comunidad y preocupado por las problemáticas sociales, Rossi desplegó recientemente una campaña para detener el avance de las apuestas online. "Córdoba le puso un casino en el teléfono a cada chico", declaró en referencia a la expansión del juego y las apuestas en las escuelas.

La elección del sucesor de Ojea ocurrió en la segunda jornada de la 125° Asamblea Plenaria del Episcopado. La jornada inició con una misa presidida por el arzobispo emérito de Tucumán, cardenal Luis Villalba, quien luego predicó un retiro a los obispos antes de la votación. Durante la ceremonia, los pastores elevaron una oración especial por la paz mundial y por los 90 años recién cumplidos de Villalba. 

Con información de www.perfil.com