Preservar el «legado» de Petro les cuesta (por ahora) USD 30.000 a los colombianos

Buscar trascender en las páginas de la historia colombiana es la primera meta en los planes del presidente Gustavo Petro, quien a dos meses de haber asumido el poder ya emite contratos millonarios para elegir los pasos de su mandato que pretende convertir en legado.

En un documento divulgado por el abogado Daniel Briceño en su cuenta de Twitter, se aprecia que el despacho de Petro suscribió un acuerdo de 125 millones de pesos (equivalentes a casi 30.000 dólares) con la empresa Mckinsey & Company Colombia para una consultoría a través del programa de fortalecimiento de las capacidades de gestión estratégica del sector público. 

Sin embargo, los recursos sólo cubren «la implementación de un taller de planeación estratégica para priorizar las principales metas del legado del programa de gobierno del presidente de la República».

La disposición ya tiene los fondos aprobados porque, según el documento, la Dirección de Administración de la Presidencia (DAPRE) entregó el certificado de disponibilidad presupuestaria desde el 28 de septiembre.

Para esta cuantiosa inversión, la DAPRE designó a Mayra Suárez como la asesora de la consejería presidencial para la transformación digital y gestión, mientras Felipe Child fungirá como coordinador de las actividades relacionadas con la ejecución del contrato.

¿Un dinero desperdiciado?
Procurar desde ahora la selección de sus iniciativas para garantizarse un legado habla de la fe de Petro en sí mismo, aunque en su historial al frente del poder destacan pésimos resultados de su desempeño administrativo.

Los números de su gestión en la Alcaldía de Bogotá lo demuestran. La capital colombiana no terminó siendo “una ciudad más humana” como prometió.

Aquella transformación social, económica, cultural y política, que rebasaría los tradicionales actos gubernamentales de ajuste y continuación de políticas pasadas quedó en discurso.

La percepción de seguridad no mejoró durante su periodo de gestión en comparación con 2008. Para entonces, sólo 21 % de la ciudadanía se sentía segura, una realidad que contrastó con el 33 % en el periodo anterior, según mostró la encuesta de Bogotá Cómo Vamos.

Tampoco terminó el proyecto más ambicioso en movilidad para mejorar la calidad de Transmilenio: el SITP (Sistema integrado de Transporte Público) tras dejar a un lado al encargado, Javier Hernández. En materia educativa, sólo terminó uno de los 30 colegios que prometió.

Y si se recuerda la meta de construir 70.000 viviendas de interés prioritario (30.000 para familias vulnerables y 40.000 para víctimas de la violencia) Petro terminó apenas con 7.000 inmuebles en construcción, habilitados con redes de servicios públicos, pero sólo 393 entregados.

Un legado bastante discutible que, en su momento, la Veeduría precisó que alcanzó el 57 % de sus propuestas, una ejecución marginal de 30 billones de los 52 billones otorgados al plan de desarrollo, sin contar con las 30 promesas incumplidas que destacó la Contraloría Distrital.

Viáticos estratégicos
La administración de los fondos públicos por parte de Gustavo Petro genera cuestionamientos. Briceño se pregunta por la falta de austeridad en la Casa de Nariño, cuando la promesa de campaña fue gobernar sin derrochar.

Ocurre todo lo contrario. Incluso, la primera dama, Verónica Alcocer, quien ahora figura como embajadora en Misión Especial, recibió 63 millones de pesos como viáticos para sus tres viajes al exterior mediante un decreto firmado el 14 de septiembre que avaló la entrega de la suma que equivale a un poco más de 14.000 dólares para cubrir 12 días y medio de gestiones diplomáticas en el Reino Unido, Tokio y Nueva York . Esta vez, la transacción la pactó el Ministerio de Relaciones Exteriores y la Agencia de Viajes y Turismo Goldtour S.A.S.

Esta situación ha generado debate público e incomodidad a lo interno en el gobierno, dado que la primera dama estaría asumiendo atribuciones que le corresponderían a la vicepresidente Francia Márquez, quien parecer no estar a la cabeza de la lista para heredar el «legado» de Petro. ¿Será su esposa quien se quedará con ese legado?

Fuente: PanamPost