El tiempo - Tutiempo.net

Precios Cuidados, cada vez más insostenible: qué aumentos evalúa permitir el Gobierno

ECONOMÍA 13/05/2022 Claudio Zlotnik*
527171

En una jugada sorpresiva, el Gobierno convocará a las empresas que participan del programa de "Precios Cuidados" para adelantar el aumento de precios que correspondería aplicar recién en el mes de julio.

La decisión se tomó luego de que se comprobaran serios problemas con el abastecimiento de productos que forman parte del programa oficial. Todavía no está todo cerrado, pero la posibilidad más clara es que los aumentos fuera de agenda, a partir del 1° de junio, sean de al menos 5% en promedio.

Hay una realidad: en las góndolas de los supermercados resulta cada vez más problemático encontrar los artículos de "Precios Cuidados". Esto se debe, básicamente, a dos cuestiones: por un lado, la explosión de la demanda por parte de los consumidores, que buscan esos artículos que cada vez quedan más baratos respecto de los que tienen "precios libres".

La otra realidad es que algunas empresas fabricantes prefieren vender los productos de "Precios Cuidados" a los mayoristas y a los autoservicios, donde no existe ese programa oficial y, por lo tanto, pueden facturar más caro que a las grandes cadenas.

De acuerdo a la estimación oficial, los faltantes de productos de "Precios Cuidados" llegan al 40%, e incluso al 50%, en algunos rubros de alimentos, como aceites, lácteos, harinas y hasta de galletitas.

La determinación se tomó en medio de la aceleración de la dinámica inflacionaria. Sobre todo en los productos que integran el denominado consumo masivo (alimentos, bebidas, productos de higiene y de limpieza). La inflación, justamente, viene golpeando especialmente a la canasta básica alimentaria. Cuando hoy el INDEC dé a conocer la inflación de abril quedaría expuesto que los alimentos registraron un alza superior al 60% en el último año.

Precios Cuidados: ahora, la recalibración

Con la idea de que los fabricantes aseguren la provisión de los 1.359 productos que integran el programa, Roberto Feletti convocará a las empresas para flexibilizar las condiciones del plan.

La última vez que se renovó Precios Cuidados fue a comienzos del mes pasado, cuando se otorgó un ajuste del 6,4% hasta el 7 de julio.

En principio, la idea es otorgar un aumento adicional en torno al 5% el 1° de junio. Bajo el compromiso empresario de que no falten productos en las góndolas.

La brecha y los faltantes

Históricamente, el cumplimiento de "Precios Cuidados" en las góndolas ascendía al 80% e incluso el 90%. Podían faltar algunos aceites, pero en general no había problemas de abastecimiento.

El problema se agudizó hace algunos meses, con el shock inflacionario derivado de la guerra en Ucrania, que llevó a la inflación de los alimentos por encima del 7% mensual.

Ese salto, de una peor magnitud que cuando en la Argentina hubo mega devaluaciones, ensanchó la brecha entre los "precios cuidados" y los "precios libres".

Esa diferencia, que en épocas normales podría alcanzar a no más del 20% o 25%, ahora saltó al 60% y al 70%, en el caso de los aceites.

De hecho, los aceites y lácteos son los dos rubros con más cantidad de faltantes en las góndolas.

Ventas: uno de cada cuatro

Históricamente, el peso de "Precios Cuidados" sobre el total de ventas de las grandes cadenas nunca superó el 10%. Ese fue el máximo. La dinámica cambió a partir de la pandemia, y más precisamente desde que el Gobierno primero congeló y luego liberó los "Precios Máximos".

Ante los aumentos de precios y la aceleración inflacionaria, la diferencia entre "Precios Cuidados" y el resto se hizo cada vez más relevante para el presupuesto familiar, y los consumidores se fueron volcando a la compra de los productos incluidos en el programa oficial.

De aquel 10% de hace un par de años -que en ese momento había marcado un máximo-, el peso de "Precios Cuidados" creció hasta el 24% de ahora. Uno de cada cuatro pesos de facturación; nada menos.

La revelación surge de un reporte de la consultora Scentia, especializada en consumo masivo, y da cuenta de un cambio profundo en el perfil del consumidor argentino, en un contexto de aceleración inflacionaria y shock de aumentos tras el comienzo de la guerra en Ucrania. Scentia tiene información precisa sobre las ventas de más de 1.100 bocas de expendio de las grandes cadenas de supermercados distribuidas en el país.

¿Se enfría el consumo?

Todavía no está claro la magnitud del enfriamiento de la actividad económica por culpa de la aceleración inflacionaria.

El Gobierno tomó algunas medidas para apaciguar el efecto nocivo: hubo un bono de compensación para los jubilados y se anunció otro por $18.000 para trabajadores informales, que se empezará a abonar la próxima semana, y se adelantaron los aumentos del salario mínimo (de diciembre a agosto).

El shock inflacionario ya impacta en el nivel de consumo: según la propia consultora Scentia, las compras en supermercados, autoservicios y almacenes de barrio crecieron 6,7% en marzo -contra el mismo mes del año pasado-, por debajo al aumento del 9,9% que había mostrado en febrero (vs febrero de 2021).

Incluso, el golpe al consumo incluye algunos de los productos esenciales de la canasta básica: las ventas al mercado interno de leche y de carne cayeron en la primera parte del año, en sintonía con la imparable suba de los precios.

El consumo de leche, acaso uno de los productos más inflexibles a la baja, cayó un 2% en febrero respecto del mismo mes del año pasado. 

En relación a diciembre último, la caída resultó del 8,7% pero en ese retroceso no sólo se toma en cuenta las menores compras de leche por parte de la población por efecto de la inflación sobre los bolsillos sino que también habría que tomar en cuenta un efecto estacional.

El consumo de carnes también está en rojo. De acuerdo a los registros de CICCRA (frigoríficos que atienden al mercado interno), el retroceso fue de 2,7% en marzo último versus marzo del año pasado.

El mercado se viene achicando considerablemente en los últimos años. Viene de una caída del 13,1% en relación a marzo de 2020. Y del 18,4% versus marzo de 2018.

El actual consumo de carne -de unos 47 kilos por año por habitante- es un 50% más bajo que en el año 2009, cuando fue el último pico de ventas (70 kilos por año por habitante).

 

 

* Para www.iprofesional.com

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto