Brutal golpiza a árbitros en Córdoba: jugadores los agarraron a patadas

La violencia volvió a decir presente en el fútbol cordobés y de la peor manera. En Villa Dolores, tras el pitazo final que marcó el 2-2 entre Comercio y Travesía, los jugadores visitantes atacaron a golpes a la terna arbitral.

Al parecer, enfurecieron por un penal marcado a favor del local en los últimos minutos del partido. A las corridas, titulares y suplentes encerraron a los jueces y los agredieron mientras la Policía intentaba separar. 

Marcelo Frossasco, titular del Cosedepro, advirtió que habrá duras sanciones. "Hay mucho material fílmico. Que le pongan nombre, apellido y DNI a cada uno de los responsables, para incluirlos en el programa Tribuna Segura y que no puedan ingresar por todo el tiempo que les corresponda por ley", dijo en El Show del Lagarto.

Sin vueltas, calificó a los agresores como "delincuentes". "Nada tienen que hacer en el deporte. En general los que comienzan los incidentes son los simpatizantes, en este caso fueron los jugadores y es doblemente agravante, inadmisible", marcó.

En primera persona

Mario Rojo fue el árbitro principal del encuentro y se llevó la peor parte de la golpiza. Si bien no sufrió heridas de gravedad, terminó con lesiones en la parte derecha del rostro, en la zona del pómulo y el ojo.

"Cuando fui a ver la denuncia me vio la médica y no era nada grave. El que peor la pasó fui yo, los asistentes tienen raspones por las patadas", detalló.

Sobre la situación del penal y el cierre del partido, describió: "Iba ganando la visita 2 a 1, con uno más por la expulsión de un jugador local. Y a los 45 del segundo tiempo hay un penal claro para el local, la gente de la visita no reclamó tanto. Pero sí se armó un entredicho entre los jugadores. A nosotros no era un reclamo fuera de lo normal, el jugador reconocía que fue mano".

Pese a eso, todo se desmadró: "Había bronca entre ambos, amonesté a los involucrados, reanudo el penal y convierte el local. Cuando termina el partido a los dos minutos, se desata todo en el banco de suplentes y empiezan las patadas".

Fuente: El Doce