Maximiliano Ferraro: “No vamos a permitir pactos de impunidad ni que avasallen las instituciones”

Maximiliano Ferraro transcurre la cuarentena en San Telmo, con salidas al Congreso y algunos otros sitios por reuniones. Hasta ahora no fue hasta la casa de Elisa Carrió en Exaltación de la Cruz, aunque mantiene un contacto telefónico frecuente. Titular de la Coalición Cívica y jefe del bloque de diputados nacionales, enfrenta el desafío de conducir el partido con su fundadora en otro rol y posiciones más componedoras que lo habitual para ese espacio. "No hay lugar para carroñeros y oportunistas", dice en una entrevista con Clarín, en la que a la vez lanza una advertencia al Gobierno: “Vemos ciertos avances que pretenden consagrar pactos de impunidad y debilitar las instituciones”.

-Hay una discusión por el rol de la oposición en la crisis. ¿Cuál es su postura?

-Juntos por el Cambio está cumpliendo con el rol que le asignó la sociedad, que es representar al 41% de los ciudadanos. Estamos llevando adelante una oposición responsable, pero a su vez marcando las cosas que creemos que hay que marcar. Ojalá hubiéramos tenido durante los cuatro años de Macri una oposición que se comportara de la manera que lo venimos haciendo.

-¿La Coalición Cívica tomó una posición más prudente por la pandemia?

-Lo dijimos desde un principio. Sacar ventajas personales y políticas con la muerte y la pandemia es inmoral y éticamente reprochable. Lo es también jugar con el miedo de la sociedad, en términos sanitarios, sociales y económicos. No hay lugar para la mentira, los carroñeros, oportunistas, irresponsables e imprudentes. Y desde la CC no vamos a permitir la impunidad ni que se avasallen las instituciones. Lo vemos en situaciones como el DNU que habilita el manejo discrecional del Presupuesto, la maniobra de (Carlos) Zannini con el pacto con Irán, el retiro de las querellas por parte de la Oficina Anticorrupción y la actitud inadmisible del Secretario de Derechos Humanos (Horacio Pietragalla) pidiendo prisiones domiciliarias para coimeros confesos.

-Habló de terreno fértil para el autoritarismo por la pandemia, ¿percibe un riesgo en ese sentido en Argentina?

-El mundo está viviendo un momento histórico, que ya se vislumbraba previo a la pandemia, pero que se ha potenciado y la Argentina no está exenta. Por los estados de excepción permanente y la ausencia de legalidad. Eso nos pone ante dilemas que tienen que ver con pensar la salida, entre utilitarismo y deber social, economía y salud pública, cierre de fronteras o libre circulación, humanismo-ecumenismo o miedo al diferente. Creemos que nos tenemos que recostar en ideas y principios ligados a la república, a la democracia liberal moderna y al humanismo.

-¿Traza una división entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner?

-Esa es una respuesta que tendría que dar el propio Presidente. Se toman decisiones que hacen a la consagración de la impunidad y cuando salen a la luz pública el Presidente dice no conocerlas. Es una cuestión que puede ser de alta gravedad. ¿El Presidente acuerda con estos avances de la vicepresidenta o no tiene conocimiento de muchas áreas sensibles vinculadas a la institucionalidad y la lucha contra la corrupción? Es una pregunta y una contradicción que tendrá que resolver el Gobierno.

-La CC pidió auditar las contrataciones en la Ciudad, luego de la compra de barbijos con presuntos sobreprecios y las sospechas con el alquiler de hoteles, ¿le preocupa la transparencia en un gobierno de la coalición?

-La CC pidió lo que hubiera pedido siempre, tanto para un gobierno del cual no somos parte como de otro del que podemos ser aliados desde el punto de vista político y parlamentario. También lo hicimos en los cuatro años del gobierno de Macri. Es importante que se tomen todas las medidas necesarias para que funcionarios, empresarios e intermediarios no se aprovechen de la situación sanitaria.

-Hace dos semanas pidió ir saliendo de la cuarentena, ¿qué dice ante el endurecimiento de medidas en la nueva fase?

-Planteamos que era importante y prioritario seguir cuidando la salud de los argentinos y también cuidar la economía. Con un trabajo coordinado entre Nación y cada una de las provincias y el caso particular de la Ciudad, ir pensando de qué manera vamos a salir de esta enorme crisis social y económica. Y en ese sentido es importante buscar una salida ordenada, programada y con consignas muy claras de cuidado colectivo y de cumplimiento efectivo por parte de todos.

-En una reunión virtual de Juntos por el Cambio hablo de apuntar a la unidad más que a la unanimidad. ¿A qué se refirió?

-Hay que resaltar el trabajo desde el 10 de diciembre por sostener la unidad. Muchas veces se pretende construir posiciones de unanimidad, que es distinto a la unidad. La diversidad permite la posición de distintos tipos de liderazgos como los que hoy tiene Juntos por el Cambio. Eso fortalece la unidad del espacio.

-¿Macri dejó de ser el único líder de la coalición?

-Vamos a legitimidades más compartidas y colectivas. Por supuesto que su figura es importante, es un ex presidente que puede ayudar mucho producto de la experiencia, pero también hay otros como el de María Eugenia Vidal, Horacio Rodríguez Larreta, los que surjan del radicalismo y de la Coalición Cívica, la propia Lilita que más allá de correrse de la política cotidiana sigue siendo una voz muy importante en el espacio. Ese corrimiento le permite colaborar y pensar desde otro lugar, de qué manera podemos construir una política más humanista.

-¿El de Macri fue un gobierno humanista?

-A ver... Yo creo que el gobierno de Macri y de Cambiemos con sus aciertos y errores va a ser reconocido en la historia. No es poca cosa que un Gobierno no PJ haya podido terminar su mandato y le haya entregado después de cuatro años el poder a otro presidente elegido democráticamente. Para hacer un análisis mucho más exhaustivo hay que dejar que corra el tiempo.

-¿Hay una transición del liderazgo hacia Rodríguez Larreta como plantean algunos en Juntos por el Cambio?

-Nada está definido, por eso remarco la importancia que tienen los tres partidos nacionales y los distintos liderazgos que conviven en este espacio. No creo que sea conveniente adelantar escenarios, posiciones y transiciones hacia 2021.

-¿Carrió se va a mantener en esa especie de cuarentena política en lo cotidiano?

-Está cumpliendo la cuarentena desde el punto de vista sanitario y social a rajatabla. Tiene que cuidar su salud. Y a partir del 1° de marzo tomó una decisión política y personal que desde la CC avalamos. Está presente y colabora desde una posición mas estratégica, de ayudarnos a pensar el mundo que viene.

-Al correrse Carrió, ¿a la CC le costará más tener peso dentro de Juntos por el Cambio?

-Por supuesto que Carrió es irreemplazable. Es y ha sido una de las figuras centrales de la política argentina en los últimos 25 años y sigue siendo una voz muy importante. Es un desafío para nosotros, hay distintos tipos de liderazgos en el partido y nos complementamos muy bien para cubrir toda la cancha.

Con información de www.clarin.com sobre una nota de Martín Bravo