Automotrices pasan a modo "home office" por coronavirus

La primera quincena de marzo era auspiciosa para el sector automotor. Si bien las ventas caían respecto a un año atrás, la baja era menos marcada. Por un lado, porque se comparaba con un mes bastante malo del 2019 pero, por otro, las fuertes bonificaciones hicieron que los interesados se acercaran a los locales. Todo venía bien hasta que llegó el coronavirus y ahora sólo hay incertidumbre.

Hoy se hará en la asociación que agrupa a las concesionarias (ACARA) un balance de la actividad del primer fin de semana marcado a pleno por la pandemia. La multiplicación de casos, la saturación de información y las declaraciones de los máximo funcionarios del Gobierno enrarecieron el clima. Hasta hace pocos días, la situación de Italia o algún otro país era la que llenaba los noticieros y diarios.

En cambio, con el correr de la semana, las noticias locales fueron desplazando a las internacionales. Eso empezó a sentirse en los salones. “El sábado tuvimos menos afluencia de público. Mucha gente que había quedado en pasar, no lo hizo. Con los anuncios del Gobierno, la situación va a ser más difícil los próximos días” explicó ayer el gerente de una concesionaria de marca líder. El relato se repite en otras agencias. “Después de dos fines de semana un poco más movidos, volvimos a la normalidad. ¿Quién va a estar pensando en comprar un auto en estas condiciones?”, reflexionó otro empresario.

Las proyecciones del mes hablaban de un mercado de más de unas 34.000 unidades, lo que significaría una baja de menos de 20% contra marzo del 2019. Sin embargo, nadie puede asegurar ahora que se cumplan. En los próximos días, se empezará a develar hasta dónde golpea la propagación del virus.

En este contexto, las automotrices se preparan para resistir un largo tiempo. Por este motivo, algunas empiezan desde hoy a implementar el sistema de home office. Por ejemplo, Ford, Chevrolet y PSA (Peugeot-Citroën-DS)decidieron que todo el personal administrativo o que no demande una función presencial, realice sus tareas desde sus casas.

El resto lo está implementando de forma parcial o lo tiene en estudio. Distinta es la situación en las plantas. Algunas fábricas están con diagramas de suspensiones o con actividad restringida, mientras que otras operan normalmente. Sin embargo, todo está supeditado a la evolución de la situación en el país y a nuevas medidas que pueda implementar el gobierno si no se controla la enfermedad.

Con información de www.ambito.com sobre una nota de Horacio Alonso